Ante el repunte de meningitis que se observa desde 2014 (en 2019 van 51 casos en la Comunidad de Madrid), Sanidad recomienda vacunarse. Un artículo del doctor Juan José Granizo
Recientemente la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, de acuerdo con el Ministerio de Sanidad, ha modificado su estrategia de acción con respecto a la vacuna contra el meningococo que es una de las bacterias causantes de meningitis y sepsis, junto con el neumococo y el Haemophilus influenzae tipo B.
El calendario vacunal de Madrid incluye, hasta ahora, la vacunación de todos los niños contra neumococos y Haemophilus, junto con una vacuna contra el serotipo C del meningococo, pero no contra el serotipo B (comercializada como Bexero ®).
Esta última se reserva únicamente para pacientes de alto riesgo, aunque muchas sociedades científicas la recomiendan para población general pediátrica.
Al quedar fuera de la financiación pública la vacuna contra el serotipo B, muchos padres han decidido administrarla a sus hijos pagando de sus bolsillos el considerable coste que supone.
Lo que tienen en común estas tres bacterias – neumococos, meningococos y Haemophilus- es que poseen una estructura de protección, a modo de envoltorio, denominada cápsula que es una de las razones de su agresividad y virulencia.
La cápsula actúa como un eficaz blindaje contra el sistema inmunitario pero, a su vez, es reconocida por el sistema inmune para producir anticuerpos protectores contra la enfermedad.
Si los anticuerpos están presentes, la defensa se activará rápida y eficazmente (es lo que se consigue con la vacuna) pero si no hay anticuerpos, generarlos por primera vez lleva demasiado tiempo como para ser eficaces en el caso de una infección que puede ocasionar un daño catastrófico en pocas horas.
Para más inri, las bacterias tienen diferentes tipos de cápsulas, que desde el punto de vista de la inmunidad es lo que llamamos serotipos. En el caso de meningococo, hay 12 serotipos identificados pero el 95 % de los casos de enfermedad se producen por los serotipos A, B, C, W, X e Y.
La inmunidad contra un serotipo no sirve de nada contra otro, de manera que a efectos prácticos, la vacuna contra el serotipo C será inútil contra el serotipo C y viceversa.
Y bien…¿Por qué se va a modificar la vacunación?
La razón es un cambio en el patrón epidemiológico de la infección por meningococo.
Desde la temporada 1999-2000 ha habido un constante descenso en la incidencia de casos y de muertes causadas por esta bacteria (un 90 %) pero desde 2014 se está observando un repunte, que quizás se haya acentuado en los últimos meses (en lo que va de año hemos contabilizado 51 casos en la Comunidad de Madrid, frente a 28 en el mismo periodo de 2018).
Este rebrote se ha producido en adultos jóvenes y por los serotipos C, W e Y.
Por tanto, y aprovechando que hay una nueva vacuna tetravalente que protege frente a los serotipos A, C, W, Y (comercializada como Nimenrix ®), se va a incluir esta vacuna en el calendario vacunal para proteger a los adolescentes de cara a años venideros.
La nueva estrategia de vacunación tiene dos niveles.
El primero es cambiar en todos los niños de 12 años la dosis de recuerdo de vacuna contra el serotipo C por una dosis de la vacuna tetravalente ACWY, lo que se empezará a hacer desde finales de julio de este año.
Hasta ahora, la vacuna contra el meningococo C se ponía a los 4 y 12 meses con una dosis de recuerdo a los 12 años. Es esta dosis final la que cambia.
El segundo es revacunar a los adolescentes y adultos jóvenes de manera progresiva para conferirles inmunidad frente a estos serotipos.
Debido a la limitación de vacunas, esto se hará por fases. Este año se quiere vacunar a los nacidos en 2001 y 2002, al año siguiente a los nacidos en 2003/04 y por último en 2021 se revacunará a los nacidos entre 2005 y 2007.
Por el momento no hay más cambios, ya que como se ha dicho, son adultos jóvenes los afectados por la modificación del patrón epidemiológico.
Es necesario alertar para que no se adelanten las dosis antes de tiempo ya que la capacidad de fabricar vacunas, por el momento, es bastante reducida para las necesidades y es imprescindible organizar la vacunación priorizando por el riesgo.
Y por último, recordar que no hay cambios con las vacunas contra neumococos y Haemophilus influenzae tipo B.
Todos los niños que han sido vacunados desde la sanidad pública serán llamados desde atención primaria.
No obstante, si tiene hijos nacidos en 2001 o 2002 y no son citados para la revacunación en lo que queda de año, no dude en ponerse en contacto con su médico.
Juan J. Granizo, especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública