Andrés Cabrera, de ascendencia judía, fue un personaje muy importante en su tiempo: Mayordomo mayor, escribano, consejero y tesorero durante el reinado de Enrique IV

Andrés Cabrera es otro de los personajes importantes durante la segunda mitad del siglo XIV. De ascendencia judía que ocupó los cargos de mayordomo mayor, escribano, consejero y tesorero durante el reinado de Enrique IV, quien lo hizo señor de Moya por sus servicios.
Posteriormente, la reina Isabel I lo ennobleció dándole el título de Marqués de Moya y señor de Chinchón.
Nació en 1430 en Cuenca en la familia judeoconversa de apellido Giljaba quienes cambiaron el apellido por de Madrid. Su padre, Pedro López de Madrid fue alcalde de Cuenca, se casó con María Alonso de Cabrera. Andrés adoptó como apellido el de su madre, Cabrera.
Fue el tercero de ocho hijos. Hermanos suyos fueron Pedro, militar y veinticuatro de Sevilla; Alfonso, regidor de Cuenca; Fernando, vecino de Segovia y servidor de su hermano; Lope, vecino de Cuenca y maestresala de los Reyes Católicos; y Juan, sacerdote y arcediano de la catedral de Toledo. Dos de ellos fueron acusados por la Inquisición, aunque no fueron juzgados.
Fue introducido en la corte del príncipe de Asturias, futuro Enrique IV, por Juan Pacheco. Una vez proclamado Rey, Andrés acompañó a este en las campañas de Granada. Durante estas ingresó en la Orden Militar de Santiago y recibió la Encomienda de Mures y Banazura.
En 1463, Enrique le entregó el Señorío de Moya. Dos años más tarde, Andrés fue nombrado tesorero de Segovia y Cuenca y en 1470, Alcaide del Alcázar de Segovia donde estaba depositado el tesoro real y Justicia Mayor de esta misma ciudad. Poco más tarde fue nombrado Camarero Mayor y consejero.
Poco años antes, Andrés se había casado con Isabel de Bobadilla. Hija de unos miembros de la pequeña nobleza, su padre, Pedro de Bobadilla, era el alcaide del castillo de Arévalo donde residió la Reina Viuda, Isabel de Portugal con sus dos hijos Isabel y Alfonso. Ambos eran hijos del segundo matrimonio de Jun II y hermanos de padre de Enrique, futuro Enrique IV.
Durante su estancia en el castillo, Beatriz, a pesar de ser unos años mayor que Isabel, se convirtió en amiga y confidente de ésta. Tuvo un papel relevante ante la Reina hasta la muerte de Isabel.
Durante la sublevación nobiliaria, Cabrea permaneció leal al Rey.
Andrés trabajó mucho para que el Enrique reconociera como heredera de Castilla a su hermanastra Isabel, futura Isabel I, cosa que ocurrió en 1468, cuando Enrique e Isabel firmaron el Tratado de los Toros de Guisando, donde, además, el Rey se reservaba el derecho a acordar el matrimonio de Isabel. Pero, Isabel se casó en secreto con Fernando de Aragón un año más tarde lo que hizo que Enrique cambiara su decisión y nombrara como heredera a su hija Juana.
Andrés apoyo el matrimonio de Isabel y Fernando por cuya causa se ganó muchos enemigos entre los partidarios de Juana, La Beltraneja.
Durante la Guerra de Sucesión de Castilla, Andrés apoyó a Isabel, futura Reina Católica. La amistad de su esposa con la princesa Isabel fue fundamental en el cambio de lealtad de Andrés, cambio que significó poner en manos de Isabel al tesoro real que estaba depositado en el Alcázar de Segovia del cual Andrés era alcaide.
Aunque Cabrera se mantuvo fiel a Enrique IV hasta su muerte, una vez ocurrida en esta al final de 1474, se puso al servicio de Isabel. Este apoyo fue recompensado con el mantenimiento de sus cargos y con otros nuevos como el Marquesado de Moya y el Señorío de Chinchón, señorío que, en 1520, Carlos I lo elevó a Condado con Grandeza de España en favor de Fernando Cabrera y Bobadilla, hijo de Andrés.
Participó en la Guerra de Granada y fue testigo de las capitulaciones de la rendición de la ciudad.
Con la llegada de los herederos de Isabel, Felipe I El Hermoso y su esposa Juana I de Castilla, abandonaron la Corte para siempre, a pesar de que la muerte prematura de Felipe y el estado de salud mental de Juana hizo necesario el regreso de Fernando El Católico, no obstante, Cabrera, hombre mayor y con los achaques propios de su edad, decidió no volver.
Beatriz murió en Madrid en enero 1511, su esposo, Andrés le sobrevivió apenas unos pocos meses, murió en Chinchón en octubre del mismo año. Ambos están enterrados en el convento de Santa Cruz que la pareja había fundado en Carboneras de Guadazaón, Panteón de los Marqueses de Moya, en la provincia de Cuenca.
Andrés Cabrera y Beatriz de Bobadilla fueron los primeros señores de Boadilla del Monte.
Joaquín de la Santa Cinta, autor de «50 héroes españoles olvidados» y “50 mujeres españolas extraordinarias”
Para saber más:
- Diccionario Biográfico. Real Academia de la Historia.
- Andrés Cabrera y Beatriz Bobadilla. Boadilla del Monte.Boadilla.com.
- Andrés Cabrera, el converso que impidió una masacre. Sfarad.es.
- Andrés Cabrera. http://boj.pntic.mec.es.