Hoy, con “Diarios de Cuarentena”, Rosa María Mateo y su banda de RTVE, el emporio pozuelero de comunicación pública, no solo nos miente sino que también nos insulta
En diferentes artículos publicados en El Correo de Pozuelo, este periódico ha venido denunciando, además de las graves limitaciones de la actual corporación municipal en el desempeño de sus responsabilidades, la abundancia de políticos ambiciosos, ignorantes y deconstructores que parecen decididos a cargarse nuestro actual sistema político y económico.
No cerremos los ojos a la evidencia de que hay gente interesada en aprovechar la tragedia del Covid-19, con sus miles de muertos y la ruina económica, para cambiar muchas cosas. Y no necesariamente a mejor.
Todo lo anterior es muy grave. Pero además hay barbaridades que estamos financiando todos los españoles. Y para más inri, desde Pozuelo. Estoy pensando en RTVE, cuyas instalaciones centrales tenemos en el municipio.
El Correo de Pozuelo también informó de las cartas que la señora Presidente de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se ha visto en la necesidad de enviar a la Administradora provisional única de RTVE, Rosa María Mateo.
Si la televisión pública (y las privadas subvencionadas) se han convertido en televisiones de partido, o más bien del gobierno, no es cuestión solo de dejar de verlas, sino de que no nos cuesten ni un euro. Pero lo que más me gustaría es que informaran con un poco de rigor. Con que se ciñeran estrictamente a los hechos y no mintieran ya daríamos un gran paso adelante. Es una cuestión de honestidad profesional y de honradez.
En España hay muy buenos profesionales del periodismo. Y también otros muchos que participan en la manipulación y la mentira más vergonzantes. Quiero pensar que se ven presionados para defender sus empleos. Me pregunto quién es más respetable, si quién alquila su cuerpo para sobrevivir, o quién alquila su mente. Los primeros cobran de los que voluntariamente requieren sus servicios. Los segundos cobran metiéndonos directamente la mano en el bolsillo. Adivine el calificativo con el que pienso se podría describir a Rosa María Mateo.
Debo de ser de los últimos ingenuos que creen que es posible, o que debería ser posible, vivir dignamente de un trabajo honrado. Pero ya veo que muchos no piensan así. Sobre todo, en la política y en la cúpula de RTVE. De niño me enseñaron que el fin no justifica los medios y que el octavo mandamiento era no dirás falso testimonio ni mentirás. Ahora entiendo todavía mejor que se trataba de normas básicas de convivencia. Igual que el séptimo mandamiento, que dice algo tan escueto como no robarás. Por eso me da miedo que haya políticos y periodistas que se pasen por donde yo me sé todas estas normas, comunes a cualquier cultura y religión. Y no es solo nuestro dinero lo que ponen en riesgo.
Cuando ya estaban cerradas estas reflexiones, nos llega información de que está próxima a estrenarse una comedia titulada Diarios de la cuarentena, descrita por la propia RTVE como una sitcom realista e íntima sobre el lado más divertido de la convivencia en tiempos de pandemia. No entendemos que se puedan tomar a risa situaciones relacionadas con algo que lleva provocados más de 12.000 muertos. Sobre todo, para los familiares de los fallecidos. Ni entendemos la prisa que se han dado en escribir los guiones, fichar al reparto y grabarla. Los mensajes en Twitter mostrando la más profunda indignación se cuentan por centenares.
Rosa María y su banda, no solo nos miente sino que también nos insulta ¿Hasta cuándo? ¿Hasta dónde? ¿Para qué?
Juan Alatriste