Héroes de la Guerra de África: Juan Prim y Leopoldo O´Donnell
La Guerra de África, o Primera Guerra de Marruecos, fue una guerra entre España y el Sultanato de Marruecos que duró cuatro meses, entre Diciembre años 1859 y Abril de 1860, durante el reinado de Isabel II, y terminó con el Tratado de Wad-Ras.
De esta guerra fueron héroes destacados dos importantes políticos y militares españoles: Juan Prim y Leopoldo O´Donnell.
La guerra fue una consecuencia de los continuos acosos e incursiones que sufrían las tropas españolas destacadas en las distintos plazas de soberanía española del norte de Marruecos.
En 1859, el Gobierno de España, presidido por Leopoldo O´Donnell, firmó un acuerdo diplomático con el Sultán de Marruecos que afectaba a las plazas de soberanía española de Melilla, Alhucemas y Vélez de la Gomera, pero no incluía a Ceuta.
A continuación, el gobierno decidió realizar unas obras para mejorar la defensa de esta última ciudad, lo que fue considerado por Marruecos como una provocación.
En Agosto de ese año, unos grupos de marroquíes atacaron un destacamento español que custodiaba la reparación de algunos fortines de la defensa exterior de Ceuta. El Gobierno exigió del Sultán de Marruecos, Muley Abd al Rahman, un castigo ejemplar de los agresores.
Poco después falleció el Sultán y su sucesor, Muhammad ibn Abd al Rahman, no cumplió las exigencias del Gobierno, por lo que este decidió invadir el reino de Marruecos tomando como pretexto el no cumplimiento de la reclamación del castigo.
La respuesta popular fue unánime a favor de la invasión por lo que el Gobierno pidió al Congreso de los Diputados la declaración de guerra a Marruecos.
En Diciembre, el ejercito desembarcado en Ceuta el mes anterior, inicio la invasión. Se trataba de un ejército mal preparado, mal equipado y peor dirigido, con una logística y sanidad muy deficientes. De los cerca de 4.000 muertos españoles en la campaña, más de 2.600 lo fueron por enfermedades entre las que estaba el cólera.
El ejército se dividió en tres cuerpos mandados por los generales Rafael de Echagüe, Juan Zabala y Antonio Ros de Olano. La caballería estaba al mando del general Félix Alcalá Galiano y el cuerpo de reserva por el general Juan Prim. El mando supremo lo ejercía el propio O´Donnell que, además de Presidente del Gobierno, era Ministro de la Guerra.
Las fuerzas navales fueron mandadas por el almirante Díaz Herrero.
El ejército estaba formado por unos 45.000 soldados, con unas 60 piezas de artillería y 3.000 mulos y caballos. La flota estaba compuesta por 20 buques y 20 lanchas cañoneras.
Los objetivos fijados para la campaña eran la toma de Tetuán y la ocupación del puerto de Tánger.
Previo a la llegada del grueso de las tropas a Ceuta, se llevaron a cabo dos acciones para mejorar las defensas de la Plaza y desplazar a las tropas moras de sus posiciones. Así, el general Juan Zabala tomó la Sierra de Bullones el 9 de Diciembre, por su actuación en esta guerra fue nombrado Marqués de la Sierra de Bullones y condecorado con la Gran Cruz Laureada de San Fernando.
Días antes, el general Rafael Echagüe había tomado las fortificaciones enemigas del Palacio del Serrallo a escasos tres kilómetros de la frontera de la Plaza. Por esta acción fue nombrado Conde del Serrallo. En esta batalla fue condecorado con la Cruz Laureada de 1ª clase de la Orden Militar de San Fernando el teniente del Batallón Cazadores de Segorbe Nº 18, Bonifacio Álvarez Obes.
La primera batalla se libró el 1 de enero de 1860 en los altos del valle de los Castillejos, a unos 4 ó 5 kilómetros de Ceuta.
Al amanecer de ese día, las tropas, a excepción del primer cuerpo del general Echagüe que permaneció en la Plaza para su protección, emprendieron la marcha hacia Tetuán siguiendo el camino de ese mismo nombre, paralelo a la playa.
En vanguardia marchaba el general Prim con la División de Reserva, seguido de O´Donnell con su Estado Mayor. La retaguardia estaba formada por el Segundo Cuerpo del general Zavala. El Tercero, al mando de Ros de Olano, se atrincheró en las zonas altas del valle.
El flanco izquierdo del avance lo protegía la flota frente a la playa. Sus misiones eran facilitar, con el fuego de sus cañones, el avance de las tropas en tierra, desembarcar tropas de marinería e Infantería de Marina para dar apoyo, en caso necesario, y para evacuación de heridos.
Los enemigos, para proteger el avance hacia Tetuán, se posicionaron en las colinas que rodeaban al valle.
La División de Reserva avanzó en tromba hasta la desembocadura del río Uad el Jelú con el apoyo del Segundo Cuerpo y la Flota.
En las tropas mandadas por Prim se encontraban los Regimientos del Príncipe, los batallones de Luchana, Cuenca y Cazadores de Vergara y dos escuadrones de caballería, uno de los cuales era el de Húsares de la Princesa.
Las descargas de artillería de la escuadra hicieron fácil el avance de las tropas de tierra que consiguieron, sin grandes dificultades, desalojar a los enemigos de sus posiciones, haciéndoles huir hacia el valle.
Con el apoyo de la artillería de montaña del Tercer Cuerpo, la caballería de Prim descendió al valle junto a la infantería de marina desembarcada. El mando de las fuerzas de desembarco, Capitán de Fragata Miguel Lobo Malagamba, fue condecorado por sus acciones en esta batalla con la Cruz Laureada de San Fernando y ascendido a Coronel de Infantería del Ejército.
Después de un corto periodo sin hostilidades, que los dos contendientes usaron para reorganizarse y acumular refuerzos, se reiniciaron las hostilidades.
En un momento del combate, ante los furiosos ataques moros que querían recuperar las posiciones perdidas, se presento una situación peligrosa y la balanza se inclinaba a favor del enemigo. Los muertos de entre los Húsares de la Princesa eran muchos y se imponía la superioridad en efectivos de los marroquíes. En la batalla luchaban menos de 10.000 soldados españoles frente a más del doble del enemigo. En este delicado momento, las tropas españolas empiezan a retroceder. Entonces el general Prim tomó la bandera del Regimiento de Córdoba nº 10 y gritando: “Soldados, podéis abandonar esas mochilas que son vuestras, pero no podéis abandonar esta bandera que es la de la Patria. Yo voy a meterme entre las filas enemigas. ¿Permitiréis que el estandarte de España caiga en poder de los moros? ¿Dejareis morir solo a vuestro general? Soldados. ¡Viva la Reina!”
Dicho esto salió a galope contra las filas enemigas, seguido por los hombres del regimiento y de los soldados de los demás batallones del Segundo Cuerpo, consiguiendo la victoria en la jornada, retirándose el enemigo y dejando libre el camino a Tetuán.
Juan Prim y Prats (Joan Prim i Prats) nació en Reus en 1814 y murió en Madrid a los 56 años, el 30 de Diciembre, como resultado de las heridas recibidas en el atentado que sufrió 3 días antes.
Condecorado con la Cruz Laureada de San Fernando en la Primera Guerra Carlista, por sus hechos en esta guerra de África fue nombrado Marqués de los Castillejos con Grandeza de España.
Entre otros héroes condecorados en esta batalla se encuentran: el capitán del Batallón de Cazadores de Segorbe nº 18, Cayetano Andía Abella; Tenientes Juan Sevilla y Domínguez y Juan Bautista de Mesa y Queralt, ambos del Regimiento de Artillería a Caballo; el Cabo Pedro del Castillo Ramírez del 2º Escuadrón del Regimiento de Caballería de Lanceros de Farnesio nº 5 que consiguió arrebatar una bandera al enemigo y el Cabo Pedro Mur y Escalona del Regimiento de Húsares de la Princesa por tomar una bandera al enemigo matando a su portador.
Después de la batalla de Los Castillejos, el ejército continuó avanzando hacia Tetuán. El día 31 de Enero rechazaron un contraataque marroquí y Tetuán que se rindió el 6 de Febrero.
Leopoldo O´Donnell nació en Santa Cruz de Tenerife en 1809 y murió, exiliado en Biarritz (País Vasco Francés), a los 57 años, en 1867. Militar y político español, Primer Duque de Tetuán con Grandeza de España por la guerra que estamos comentando. Su origen familiar era irlandés, descendía de Calvagh O´Donnell, jefe del clan de los O´Donnell de Tyrconnell.
El siguiente objetivo era el puerto y la ciudad de Tánger. El ejército, reforzado por una división de infantería, unidades voluntarias vascas y catalanas, inició la ofensiva el 11 de Marzo.
El 23 de Marzo se libró la última batalla de la guerra, la de Wad-Ras, donde las tropas dirigidas por los generales Echagüe, Ros de Olano y Prim, cuya actuación volvió a ser decisiva, vencieron a los moros. La derrota provocó la inmediata apertura de negociaciones de paz. Paz que se firmó en Tetuán el 26 de Abril de 1860, mediante el Tratado de Wad-Ras entre el Reino de España y el Sultanato de Marruecos.
Entre los condecorados con la Cruz Laureada de San Fernando en esta batalla están: el Coronel Tomás Hurtado Braganciano del Regimiento de Pavía 50 y el Teniente de Infantería Antonio Dávalos del Castillo.
Por este tratado, España, además del cese de las incursiones sobre Ceuta y Melilla, conseguía la soberanía sobre las Islas Chafarinas y recibía el territorio de Santa Cruz de Mar Pequeña, futuro Sidi-Ifni.
José Colmenar
Para saber más:
- Internet con abundante información sobre la Guerra de África y sus héroes.
- Diario de un testigo de la guerra de África, en 1850. Pedro Antonio de Alarcón
Aquí falta Blas de lezo heroe de la batalla en la que derroto a los ingleses en Cartagena de indias en mayo de 1741a
No ha debido leer el libro entero. Saludos