Hoy, la defensa de las Posesiones Españolas: Desde Méjico y el Sur de EEUU hasta parte de la Columbia Británica en Canadá, las Islas Filipinas, Carolinas, Marianas y el norte de Taiwán. (IV)

Continuamos con la Expedición de Bruno Heceta y Fontecha.
Como no se había llegado a la latitud prevista, el virrey Bucareli organizó una segunda expedición en 1775. Bucareli había solicitado a la secretaria de Estado un grupo de oficiales navales formados, aptos para llevar a cabo las expediciones al Noroeste de la costa de Norteamérica.
El secretario Jerónimo Grimaldi aceptó la proposición y reunió un grupo se marinos que envió al virreinato. La relación la encabezaban los tenientes de fragata Bruno de Heceta (Vizcaino, nacido en Bilbao), Ignacio Arteaga (andaluz, nacido en Aracena), Fernando Quirós y Miguel Manrique, además de los alféreces de navío Juan Francisco de la Bodega y Quadra (peruano, nacido en Lima), Juan Manuel de Ayala (andaluz, nacido en Osuna) y Diego Choquet (madrileño). Viajaron al virreinato en dos grupos, el primero lo formaban Heceta, Bodega, Choquet y Ayala. A finales de agosto de 1773, desembarcaban en Veracruz junto con los instrumentos necesarios para hacer su labor exploradora.
La nueva expedición que preparaba el Virrey estría compuesta por tres navíos: la veterana fragata Santiago, el paquebote San Carlos y la goleta Sonora que fue especialmente preparada para esta ocasión. Los dos últimos se emplearían para llevar suministros a los puestos de la Alta California.
Al mando de la expedición puso a Bruno de Heceta, embarcado en la Santiago con Juan José Pérez como primer piloto y segundo en el mando. La tripulación era la misma del anterior viaje con los reemplazos necesarios para cubrir las bajas.
Los otros dos buques tenían como oficiales al mando: Sonora comandada por Juan Manual de Ayala con Juan Francisco de la Bodega y Quadra como segundo y Francisco Antonio Mourelle (gallego, nacido en La Coruña) de piloto; el comandante de la San Carlos era Miguel Manrique.
Las instrucciones que impartió el Virrey para la expedición fueron las misma de la expedición anterior liderada por Juan José Pérez: recalada en el puerto de Monterrey durante el viaje al norte, intentar llegar al paralelo 65º N y, en el retorno, inspeccionar detenidamente la costa y el puerto de San Francisco, además del resto de instrucciones relativas a que hacer si se encontraban con buques o establecimientos extranjeros.
El día 16 de marzo zarparan del puerto de San Blas los 160 hombres que componían las tripulaciones de los tres buques. Tres días más tarde, surgió el primer inconveniente, el capitán del San Carlos se volvió loco y tuvo que ser sustituido y enviado de regreso a San Blas. Su puesto como el comandante de la Sonora Juan Manuel de Ayala, quedando en esta última al mando de Francisco Bodega y Cuadra.
Una vez desembarcado en San Blas el enfermo, el San Carlos volvió a la mar a tratar de encontrase con el resto de la expedición. Al no contactar con ella, su comandante Juan Manuel de Ayala, decidió explorar la bahía de San Francisco, siendo sus tripulantes los primeros europeos que en entraron en ella. Volvieron a San Blas a mediados de septiembre.
Los otros dos barcos, la Santiago y el Sonora, siguieron navegando juntos y en junio alcanzaron la costa de California, a la altura de la Bahía de Trinidad (actúa Trinidad Bay, en la latitud 41º 3´N, en el condado californiano de Humbolt) donde negociaron con los indios, reclamaron formalmente la soberanía española y paliaron su escasez de agua.
Continuaron navegando rumbo norte y, el 11 de junio, llegaron a la costa en el actual Estado de Washington donde entraron en contacto con los indios quinault. Estos atacaron a una patrulla de seis hombres que habían desembarcado para recoger leña y llenar los barriles de agua, mataron a todos y, a continuación, atacaron a la Sonora que tuvo dificultades para defenderse debido a que su escasa tripulación tenía mucha gente enferma.
El comandante Heceta tomó posesión formal de la tierra como soberanía del Rey de España. Fueron los primeros no indios que pusieron sus pies en el estado y nombraron la bahía donde desembarcaron como Bahía Bucareli en honor del Virrey (actual Grenville Bay, en el estado de Washington, condado de Grays Harbor, en los 47º 24´N).
Ambos navíos siguieron su navegación al norte a pesar de las bajas que escorbuto le estaban ocasionando. La noche del 30 de julio, noche oscura y tormentosa, se separaron las dos naves. La Santiago continúo navegando hasta alcanzar, el 11 de agosto, la actual frontera entre el estado de Washington y Canadá. Habiendo alcanzado los 50º 40´N, con la tripulación debilitada por el escorbuto, decidió iniciar el regreso a Monterrey, llegando a este puerto el día 29 de agosto.
En su retorno al sur, Heceta descubrió una gran bahía, las corrientes le impidieron entrar en ella (la nombró Bahía de la Asunción, más tarde renombrada como Entrada de Heceta). Supuso que sería el estuario o la barra de algún río, y estaba en lo cierto, era el actual río Columbia. En su honor, en la costa del actual estado de Oregón, existe el cabo Heceta, con el faro del mismo nombre.
Por su parte el Sonora siguió navegando hacia el norte llegando a los 57º 58´N. Los vientos y los enfermos a bordo los hicieron regresar a Monterrey.
En su camino descubrieron y tomaron posesión de varios lugares de Alaska tales como: Sitka Sound en la actual población de Sitka en Alaska, Bucareli Sound, el Puerto de los Remedios y el Monte San Jacinto (renombrado monte Edgecumbe por James Cook tres años después) en el actual archipiélago de Alexander, en Alaska.
El día 1 de septiembre, con la tripulación y el comandante enfermo, con solo dos marineros sanos por guardia, pusieron rumbo sur, a Monterrey.
En el viaje de retorno descubrieron el Puerto Bodegas (actual Tomales Bay, en el condado de Martin en California, 38º 14´N). El 5 de otubre descubrieron el puerto de San Francisco, pero no pudieron explorarlo por falta de medios, por lo que decidieron seguir a Monterrey. El 7 de noviembre arribaron a este puerto donde encontraron anclados el San Carlos y la fragata Santiago, dando Heceta fin a la expedición.
Bodega y Mourelle llegaron tan enfermos que hubo que recibir ayuda para desembarcar.
Recuperados los enfermos, el día 1 de noviembre, la expedición al completo salió de Monterrey destino a San Blas donde llegaron el 20 de noviembre. Durante la travesía murió Juan José Pérez (había llegado muy enfermo a Monterrey, fue atendido en la misión, y se restableció), y, siguiendo la práctica habitual, su cuerpo fue arrojado al mar. El Rey lo ascendió a título póstumo a teniente de fragata.
El viaje fue considerado un éxito pese a no haber alcanzado la latitud prevista. Durante éste, Mourelle redactó un diario con datos geográficos de los lugares visitados, aunque el Gobierno español no dio noticias del viaje para no llegaran noticias de este a los ingleses, el diario de Mourelle fue robado y usado durante el viaje de James Cook.
Joaquín de la Santa Cinta, Ingeniero aeronáutico, Economista e Historiador