Ayuso juega con los vecinos, con sus afiliados y con sus votantes de Pozuelo al tenerlos sin candidato y eso le puede costar un disgusto al PP, aparte de causarle a Quislant una alferecía

No sé si la presidenta Isabel Díaz Ayuso es consciente del juego diabólico al que está sometiendo a los vecinos de Pozuelo en general. Y no solo a los vecinos sino también a los afiliados del PP y a los propios votantes peperos al no comunicar el nombre del candidato de PP a la alcaldía de esta villa.
Supongo que tendrá sus razones pero no es bueno correr el peligro de esta teoría política que, ya todo Pozuelo, considera absurda y estúpida. A dos días del mes de marzo y a menos de dos meses y medio para que se abra la campaña electoral, la ciudad está abandonada por la alcaldesa Quislant y, lo que es peor, esta mujer ha perdido la cabeza hasta el punto que, cualquier día, le puede dar una alferecía.
Y, lo que es peor, empieza a correr la idea de que el problema de Pozuelo ya no es solo de Susana Pérez Quislant sino del PP de Madrid y, por supuesto, de la presidenta Ayuso.
Y eso es malo. Para todos. Pero especialmente para la propia Ayuso que necesita los votos de Pozuelo para conseguir la mayoría absoluta.
Este Ayuntamiento es una ruina, tiene un disparatado presupuesto y su estructura funcionarial carece de la más mínima conducta laboral seria. Se necesita que venga ya alguien con la autoridad suficiente como para que devuelva la ilusión.
Pozuelo necesita que se empiece a revertir esta desoladora situación ya mismo.
¿Por qué Ayuso, entonces, no nombra al candidato del PP si políticamente es un desastre?
¿Cometerá el error de mantener a Susana Pérez Quislant?
Particularmente, no lo creo porque ese error sería superlativo y, si ya perdió hace cuatro años la tradicional mayoría absoluta del PP con Quislant, en estas elecciones no conseguiría siquiera la mayoría simple.
Además, ese nombramiento sería imperdonable. Pocos votantes peperos se lo perdonarían a la presidenta. Del resto de vecinos, nadie. Bastante ha destrozado la ciudad en 8 interminables años…
Y el problema es que, como a ELLA ya le salió bien hace 4 años, solo vive para hacerle la pelota y usar cualquier gesto para hacernos creer que es la elegida.
¿Cometerá, por otra parte, el error de poner a Enrique Ruiz Escudero?
Particularmente, tampoco lo creo. Enrique tiene muchos muertos en los armarios de Pozuelo y en El Correo de Pozuelo los hemos contado muchas veces, y le resultaría muy difícil no solo la mayoría absoluta (la Agrupación está destrozada) sino gobernar el Ayuntamiento.
Además, Escudero acaba de decir que prefiere seguir en Sanidad. Mal podrá explicar que viene a Pozuelo por imposición y no por devoción.
¿Quién queda entonces como candidato menos malo porque ya cualquiera que venga será malo?
No lo sé. Creo que se ha perdido mucho tiempo. No es fácil vender una cara nueva si es que decide traer a alguien forastero. No lo es. Aunque se diga que en Pozuelo se votaría una cabra con que la presentase el PP, en este momento no será tan fácil.
No soy yo quién para sugerir nombres pero sería bueno para Pozuelo que Ayuso eligiese a alguien que sepa que esta complicada ciudad, que tenga soluciones inmediatas y, desde luego, la garantía de que a Pozuelo volvería la seriedad. Menos samba y más trabajar, sería un buen eslogan de campaña.
Y estoy pensando en concejales de anteriores legislaturas que tuvieron que abandonar sus cargos por dignidad política ante los desatinos de Quislant o porque ELLA los dejó fuera de su lista por miedo a que le hicieran sombra intelectual y política…
Presidenta, solo tiene que preguntar… Son varios. Tiene donde elegir. Y le haría un gran favor a esta abandonada ciudad.
Juan Manuel Sánchez