Crónica de un monologo de Quislant, mal llamado Debate sobre el Estado del Municipio, y en el que solo nos queda agradecerle la suerte que tenemos con ELLA de alcaldesa de la villa

Últimamente nuestros políticos se apuntan a la versión de largos y tediosos discursos cubano/bolivarianos que ha puesto de moda durante la pandemia “CumFraude” Sánchez y que son un auténtico tedio y aburrimiento.
La Sra Quislant nos machacó durante cerca de 57 minutos (una hora de reloj) en un larguísimo monologo durante el debate del Estado de Municipio, hasta que la somnolencia se apoderó de los vecinos que seguíamos el Pleno de forma telemática. ¡NO había café suficiente para soportarlo!.
Vayamos por partes, pues, que diría el famoso personaje ingles de finales del siglo XIX.
Lo primero que hay que decir (como todos los años) es que en el debate sobre el Estado del Municipio no hay debate ni nada que se le parezca. Y es que, en realidad y como ya la mayoría de los ciudadanos a los cuales les interesa la vida municipal sabe, este Pleno es un tedioso monologo de la Sra Alcaldesa a su mayor gloria y con un cierre final para dar algo estopa a los intervinientes de la oposición. Por lo tanto, no hay debate, ni cuerpo a cuerpo, ni enfrentamiento de posiciones.
No merece la pena desgranar aquí el despliegue propagandístico que llevó a cabo nuestra alcaldesa y sobre todo en aquello que fuera echarse flores por su intervención en la crisis del covid_19 donde, si uno no conoce lo acontecido, tiene que dar gracias al destino de residir en Pozuelo de Alarcón y tener una lideresa de tan alta capacitación que si no la pandemia hubiera arrasado nuestro municipio.
La verdad, como todo el mundo sabe, es que durante las primeras semanas de la gravísima crisis sanitaria que nos sobrevino, el equipo de gobierno estuvo desaparecido del mapa y fue la sociedad civil quien se tuvo que organizar como pudo para intentar paliar los terrible estragos que la enfermedad hacía en nuestra residencias de mayores, en nuestros centros para dependientes y en los ambulatorios de la ciudad.
Quislant espera también que le agradezcamos que haya abierto la espita del dinero público, con muy pocas ideas y mucho fondo de caja (de todos los vecinos) está repartiendo dinero “a trocho y mocho” por la ciudad, en principio oficialmente para ayudar a los perjudicados por la crisis social y económica, pero no se nos escapa que con los escasos criterios de reparto que existen, tienen en muchos casos las ayudas directas “un tufillo” de fidelizar futuros electores más que sospechoso.
Seguimos con el capítulo de obras en la localidad , aquí solo le faltó a “ELLA” remontarse a la construcción de las calzadas romanas para decir que también esas obras eran suyas. Vamos que metió en el discurso las obras pendientes del pasado periodo de sesiones, con las que se van a licitar y con los proyectos que aun ni están encima de la mesa pero ella los da por hecho. Como sería la cosa que hasta nombró obras en curso por valor de 65 millones de euros…
¿Pero, alcaldesa, que ese es el presupuesto de inversiones de varios años?
En fin, miente que algo queda.
El larguísimo soliloquio siguió solo con la cara amable y muchas veces distorsionada de la actividad mínima que se espera de un ayuntamiento de estas características dentro de sus competencias, pero eso sí, escondiendo siempre la ineficacia y el pasotismo “marca de la casa”.
Si nos hablaba de Coca de La Piñera, callaba el vergonzoso asunto de los okupas que campas a sus anchas en los edificios.
Si nos comentaba el descenso (ficticio) de los delitos en el municipio ocultaba descaradamente que los vecinos de las urbanizaciones viven con el corazón en un puño por los robos y asaltos que hay a menudo en sus residencias.
Si nos vendía la desaparición de algunos tendidos aéreos telefónicos, escondía sin pudor que llevamos años esperando el soterramiento de los peligrosísimos tendidos de alta tensión eléctrica que atraviesan la ciudad.
Si nos informaba de ARPO y de Montegancedo, no nos comentaba ninguna solución a la insufrible realidad de la falta de viviendas sociales y para jóvenes en la localidad. Si nos describía el aterrizaje del carsharing y el aumento de frecuencia de algunas líneas de autobuses, ni se le ocurría mentar los atascos cada día mayores, la falta de estacionamiento permanente y grave para nuestros comerciantes y la polución que se adueña de nuestra urbe.
Y así sucesivamente trasladándonos una ciudad instalada en un “Mundo Feliz “de Huxley, donde todo es paz, armonía y felicidad.
¡Madre mía, María Susana!.
El caso es que acabó, su tedioso discurso nuestra alcaldesa con un recuerdo a “algunas“ victimas del coronavirus en la ciudad, (no sabemos bien porque nombró a unos si y a otros no) o, peor aún, porque se lanzó a nominar a las víctimas de esta terrible enfermedad sin saber (no lo sabe ni el gobierno de la nación) quienes son todos los fallecidos en nuestra ciudad, sin duda muchos más que los detallados en las vergonzantes cifras oficiales. Algún gimoteo. Alguna voz quebrada en el momento oportuno. En fin, en este punto, les confieso que me embargaba el rubor. No sigo por aquí por respeto a las víctimas.
Turno de réplica de la oposición.
Bueno aquí la crónica es sencilla porque como ustedes saben no hay oposición en Pozuelo, así que lo normal es que no haya nada que destacar.
Fuera de juego de forma taimada y caciquil (Sainz/Somos Pozuelo, al verse recortada su intervención vergonzantemente a diez minutos), el resto de los portavoces, la habitual “sin sal”.
Fernández/VOX bastante esfuerzo hizo con leer su papel, sin equivocarse mucho durante algunos minutos.
Bascuñana/PSOE, también lo habitual, amagando y no dando, no se vaya a enfadar la “Doña”.
Y Macías/Ciudadanos, con su habitual patetismo “blandiblub”, diciendo que ellos se dejarían meter mano aún más fácilmente que los socios actuales del gobierno.
En fin. ¡Penita de oposición!.
En el re-discurso de la Doña, cerca de 30 minutos más sirvieron para conocer (en plan anuncio estelar) dos novedades que al menos darán que hablar en crónicas y artículos las siguientes semanas.
UNO: Que pretende crear una Empresa Pública, modelo Empresa Municipal de la Vivienda.
¿Ahora?
¿Para qué?
Ojito con este tema que tiene pinta de coloca amiguetes y dietas, de esas que complementan muy bien los sueldos de los pedigüeños concejales y sirven para comprar voluntades.
¡En estos tiempos de crisis económica! Lo que nos hacía falta.
DOS: La creación de una nueva Concejalía “Pozuelo Agenda 2030”, que no sabemos a qué se dedicará pero que sin duda a ella la servirá para ajustar cuentas entre su equipo de gobierno, para premiar a algunos palmeros y para mandar a galeras a quienes no la han dorado este primer año suficientemente la píldora.
Estaremos muy atento a estas dos nuevas ocurrencias.
Acababa el Pleno y yo necesitaba urgentemente un paracetamol para el dolor de cabeza.
Disfruten lo votado.
El concejal 26