Historia de las fuentes de Pozuelo (II): La Poza, El Abrevadero, La de la Salud, la de Húmera y otras más. Un trabajo de Carlos H. Fernández del Valle

Continuamos en este artículo la historia de nuestras fuentes, dedicando nuestra atención a las construidas en el siglo pasado y el actual.
FUENTE DE LA POZA
Es quizás la más popular de Pozuelo. Fue construida en el siglo pasado y se le dotó de dos surtidores. Sita al lado de las fábricas de curtidos su agua se utilizaba para el lavado de ropa de los hacendados madrileños que se lo encargaban a las lugareñas que con su afluencia al lugar acabaron convirtiéndose como decía Sebastián López Ariojó, en el “mentidero municipal del siglo XIX”. Junto con este empleo, se la utilizaba también para las tareas fabriles y el riego de las huertas.
Entre las propiedades de su agua destacaban las siguientes: “disuelve el jabón y cuece admirablemente las legumbres”.
EL ABREVADERO
Estaba muy próximo a la Poza y tenía sólo un caño. Fue construida en el año 1880.
FUENTE DE LA SALUD (en la foto)
Sita en el parque que lleva su nombre, ostenta la siguiente leyenda:
TENGO MI SER EN DIOS, CON MI ELEMENTO AL AFAN DE POZUELO SATISFICE NECTAR DIVINO SOY, LLEGA SEDIENTO APAGA EN MI TU SED Y A DIOS BENDICE.
CONSTRUIDA POR SUSCRIPCION POPULAR SIENDO ALCALDE DON VICENTE BRAVO AÑO 1905
Cuando se urbanizó la hoy Fuente de la Salud, se construyeron unas mesas de madera y unos asientos de ladrillo que se colocaron en las inmediaciones de la Fuente. A la entrada se instaló un arco de madera con un rótulo que decía: “PARQUE DE SAN IGNACIO” (Agradezco a D. Francisco Martín Granizo la información sobre este punto).
En las inmediaciones hay otra fuente que se construyó en la posguerra, bajo el mandato del alcalde D. Juan Muñoz Mateos.
FUENTE DE HUMERA
De sencilla fábrica, tiene su origen en el arroyo que pasa por esta antigua villa y muere en Aravaca. Fue construida en el siglo XIX.
Cómo noticia curiosa, queremos comentar el hecho de que nuestra querida farola de la plaza de toros, ahora tristemente relegada a un segundo plano, fue fuente también durante la posguerra. Todavía mantiene la señal de los grifos).
Efectivamente, se hizo por aquel entonces una conducción de agua desde la Poza a la denominada “Fuente del Cura”. (Un simple grifo llamada así porque se encuentra en el emplazamiento de la antigua casa Parroquial en la confluencia de la calle San Roque con la carretera de Carabanchel.
Falta actualmente en los jardincillos de la parte posterior de la Casa Consistorial la fuentecilla que desde que se construyó el edificio (1952) las había servido de ornato.
Muchos nombres de la topografía de Pozuelo hacen alusión a las fuentes o alumbramientos de agua: así la fuente de Medel, en las inmediaciones de la Colonia de Benitez; la fuente de D. Pedro, casi en el límite con Majadahonda; la Fontarrona, camino de Boadilla; la Mina del niño, cerca de La Cabaña; la Mina de Portugués, en la linde con Aravaca; y la fuente de Juan Tomé, en la ladera del Camino de Alcorcón.
Carlos H. Fernández del Valle