Magnifica iniciativa: Isabel Díaz Ayuso anuncia colegios públicos abiertos por vacaciones para facilitar la conciliación a los padres. Empezarán a funcionar en enero de 2024

Que las vacaciones escolares no sean un problema para los padres, o que lo sean menos, es el objetivo del plan que ha anunciado este lunes la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso: abrirá los colegios públicos a los alumnos para los padres que opten por esta fórmula en los periodos en que es más complicado ocuparse de ellos y conciliar: las vacaciones de Navidad, las de Semana Santa, puentes y los primeros días del mes de septiembre.
La medida va a empezar a aplicarse en enero de 2024. Hasta entonces, habrá que conveniar con los ayuntamientos -que son los responsables de los edificios de los colegios- para llevarlo adelante, y contratar también a las personas que cuiden a los niños durante esos días y les organicen actividades lúdicas o de refuerzo. Estas personas, explicaron fuentes de la Consejería de Educación, no serán nunca los docentes que les imparten las clases durante el curso.
La presidenta ha realizado este anuncio durante su visita a las obras del Instituto de Secundaria Blanca Fernández Ochoa, en Montecarmelo, el que va a ser la mayor instalación educativa construida en la Comunidad de Madrid en los últimos 20 años.
Según ha explicado, las mejoras se introducirán durante el próximo curso, y concretamente, a partir del año 2024, aunque podrían aplicarse ya el 2 de enero, y durante esa primera semana del año en que no hay colegio y los niños están en casa, para desesperación en ocasiones de los padres, que tienen que buscar fórmulas para poder atenderles y cumplir con sus horarios laborales.
En esos días, se llevarán a cabo en los colegios actividades formativas, de arte, idiomas o de deporte, que serán gratuitas. El plan se aplicará a los alumnos del segundo ciclo de Educación Infantil (de 3 a 6 años) y a Primaria (de 6 a 12 años).
Además, Díaz Ayuso también ha realizado otro anuncio relacionado con la educación: se concederán ayudas para realizar actividades extraescolares a los alumnos cuyas familias tengan situaciones económicas complicadas. «Ningún alumno va a dejar de visitar museos, ir al teatro, participar en excursiones o aprender un instrumento por falta de recursos económicos, ha resumido.
Para ambas medidas, la Comunidad de Madrid calcula que destinará la cantidad de 12 millones de euros, y podrían beneficiar a 200.000 familias.