A propósito de la corrupción y las traiciones en Pozuelo, recuerdo la convulsa transición entre Pepe Martín Crespo y Jesús Sepúlveda y aquella extraña lucha PP-PADE. Un artículo de El viejo rockero J.P.

Primero, quiero pediros perdón porque la semana pasada mi hija mayor me necesitaba en su casa. Ella y su marido se marchaban de viaje a Nueva York, y los chicos no querían quedarse solos.
Y allí que fue este viejo rockero con dos adolescentes que creen tener más razón que un santo en todo aquello que afirman.
He de reconocer que ha sido divertido. Estar pendiente de sus estudios. De sus llamadas. De que comieran bien. Están de exámenes, pero están revolucionados. ¡Qué juventud nos toca lidiar!
Seguro que mi señora me dice que no me queje. Que son unos nietos maravillosos. Que de gracias. Y muchas cosas más. Buenas y bonitas, como era ella. Y, sí. Llevaría toda la razón.
Y este mundo mío de abuelo, me ha impedido escribir la semana pasada. Y, ¿cuál ha sido el resultado? Sentencia de Gürtel y cambio de Gobierno.
¡Que Dios nos pille confesados! Demasiadas cosas para un viejo rockero como yo, de AP. Sin embargo, ando entretenido con la lectura de las reflexiones que hace sobre la sentencia Yolanda Estrada. Y estoy ansioso por conocer el final.
Hay cosas que iré completando porque sí las conozco y coincido con la colaboradora que la corrupción en Pozuelo no la introdujo Jesús Sepúlveda. No sé si era una corrupción con mayúsculas o era una corrupción pequeña. Corruptelas. Pero de esas hubo siempre aquí y en todos los sitios. PP, PSOE o independientes. Sinvergüenzas ha habido toda la humanidad.
Pero en Pozuelo, que es mi pueblo, existían comportamientos que algunos descartábamos. La memoria es muy frágil. Y muchos que señalan a Sepúlveda, se olvidan de todo lo que pasó en años anteriores. E, incluso, en el mismo año, 2003.
¿Nadie recuerda el jaleo de licencias de actividad en Pozuelo? ¿Quién firmaba los proyectos? ¿Cómo te asegurabas esa licencia si tenías un negocio? ¿Nadie se acuerda de Mariano Tello? ¿De Leopoldo Gómez?
Ahora veo a algunos de la etapa de Pepe, darse golpes en el pecho. ¡Pero si comían gratis en el restaurante de la plaza, todos los días! En el mejor de los casos. Y muchos criticaron en su día que Charo (hija de Pepe) entrara en las listas del PP. Cuando todos sabíamos que era más de izquierdas que Pablo Iglesias. El de antes, no el de ahora. ¿Es esa actitud honesta con el PP? En mi humilde opinión, no.
Pero quiero hablar de Sepúlveda. Y de Yolanda Estrada. Mi memoria está frágil. Pero, como digo, la tengo.
Cuando nombraron a Sepúlveda candidato por Pozuelo, empezó una campaña de desprestigio contra él. Lo recuerdo perfectamente. Llamadas. Cafés. E incluso creo recordar que alguien quería que en vez de votar al PP, votáramos al PADE. Si. El de Enrique Ruiz Escudero. Así hacer daño al PP.
Recuerdo que yo discutí con un amigo de hace muchos años y afiliado al PP. ¿Cómo vamos a votar a esta familia de traidores? La respuesta. Por hacer daño a Sepúlveda.
Y, ¿sabéis quien estaba detrás (o al lado aplaudiendo) toda la campaña del PADE de 2003 y 2004? Yo lo sé. Pero tengo que poner, presuntamente, como lo sabemos, presuntamente, muchos pozueleros y afiliados del PP.
Leopoldo Gómez Gutiérrez. Él y Tomás Toribio y Carlos Ruiz Soto. Fueron los impulsores del PADE en Pozuelo contra el Partido Popular. Leopoldo, además, siempre apoyó a Enrique para que llegara a “lo más grande”.
¡Ay, esos cafés en Mi Hermano y yo! Cuántos secretos (o no) esconden esas mesas del Camino de las Huertas. ¡Cuántos!
Estrada no va mal encaminada. Pero, o bien no se atreve a decir lo que sabe, o bien no lo sabe. Si la valentía le falta por lealtad al PP, que piense que esa gente jamás fue leal al PP. Los Ruiz Escudero, no. Por mucho presidente local que sea. Y si no tiene la certeza, pero la intuye. Tiene buena nariz política.
Leopoldo Gómez. En lo que muchos sabemos. De quién era íntimo amigo. Con quién se reunía. Con quién conspiraba. Y a quién asesoraba en campañas. Era ni más ni menos que a Enrique Ruiz Escudero y Familia.
Lo de Sepúlveda era un odio común contra él. Le odiaba Pepe, Leopoldo, Carlos Ruiz Soto y si hijo Enrique.
Y seguiré deshojando la margarita para que sepa Estrada qué se hizo a sus espaldas, y se dijo. Para acabar con ella y Sepúlveda.
Sorpresas de la vida.
El viejo rockero J.P.
Qué bueno!!!
Totalmente cierto lo que nos cuenta.
Las licencias de actividad, lo de Leopoldo, lo de Tello y…todo lo que escribe.
Como lo de «mi hermano y yo» reunidos los Ruiz y Leopoldo al fondo, detrás de la cortina.
Y lo de Toribio, qué «gran amigo» era de Enrique y después durante cuántos años no ha vuelto a venir a verle. Aunque ahora ya anda por ahí enredando a ver si le ayuda.
Ja, ja, que tonto sería Toribio si lo hiciera.
Gracias por su participación. Saldudos
Muchas gracias por su participación. Saludos