El Real Madrid se metió en la final de la Champions a base de “collons” para cabreo de los catalanes y, lo mejor, es que puede ganarla porque el Liverpool no es nadie en defensa

Se me ocurren dos títulos de película para analizar la semifinal de Champions Bayer-Real Madrid. Uno, ‘Duelos de Titanes’para definir la eliminatoria y, otro, ‘Maverick,’ por lo de los tahúres del Mississippi, referido a las tácticas de sus entrenadores, Heynckes y Zidane.
‘Duelo de titanes’ entre dos equipos soleras europeos que han cometido fallos defensivos con trascendencia en el marcador: uno por cada equipo. Deficientes defensas con un Madrid que acabó pidiendo la hora y buscando a los detractores de Keylor Navas y Benzema.
Vi a un Madrid cobardón al que faltó presionar, lo que permitía al Bayer plantarse en un dos por tres ante la meta madridista. Un Madrid con escasa fuerza mental, con los genes bajos, y al que faltó presionar al contrario pero que sufriendo jugará su tercera final europea consecutiva.
El Bayer se presentó en Madrid con una campaña institucional contra el árbitro que pitó en el Arena y que continuó en Madrid con el turco Cakir, al que la prensa alemana acusa de robo arbitral. Fallos arbitrales los hay en muchos partidos de fútbol pero el fair play que siempre distinguió al Bayer de Múnich debería estar por encima de toda polémica.
Heyckes y Zidane, como dos buenos tahúres, jugaron a no enseñar sus cartas. Al menos a mí me lo pareció al no jugar de entrada Javi Martínez en el Bayer ni Casemiro en el Madrid. Hicieron tablas en todo, pero el gato al agua se lo llevó el Madrid.
Quiero dedicar tres líneas, porque no se merece más, la actitud de RAC1 que no ofreció el partido en directo para Cataluña pero que a falta de ocho minutos para el final puso en antena el partido ante la posibilidad de que el Bayer eliminase al Madrid. Hay pueblerinos catetos de mierda a los que les come la envida.
Pero el 26 de mayo en Kiev puede haber un triplete de Champions para el Madrid, que se ha proclamado finalista a base de ‘collons’, mientras que el Barça, que aspiraba a otro triplete se ha quedado en el camino. Lo dijo Vujadin Boškov: FUTBOL ES FUTBOL.
Y el Liverpool es débil en defensa.
José Antonio Rosa