¿Qué hará la alcaldesa Quislant con Francisco de Húmera, el más insigne hijo de Pozuelo de la historia, que está enterrado en la cripta de la Iglesia de la Consolación?

Existe un estudio de unas cien páginas, escrito por don Ángel Montero Sánchez, que cuenta la historia de este insigne pozuelero, que está enterrado en la cripta de la Iglesia de la Consolación y del que ya hemos hablando en El Correo de Pozuelo.
En ese original se recogen cosas como estas:
“Don Francisco de Húmera, natural de Pozuelo, licenciado, protonotario apostólico, vicario general del ejército en Flandes y administrador de los Hospitales Reales de los tercios en el período 1579-1590, creador del primer pósito que hubo en esta villa y de diversas memorias y obras pías.
Posiblemente, Don Francisco de Húmera sea el personaje más importante, y desconocido, de todos cuantos han nacido en Pozuelo de Alarcón.
- El 16 de enero de 1615 don Bernardo de Sandoval y Rojas, cardenal arzobispo de Toledo concedió permiso a don Francisco de Húmera “para hacer capilla y altar en la iglesia de Pozuelo; para ello se había de romper la pared norte, quedando el cuerpo de la capilla fuera de la iglesia, y en lo roto hacer un arco de piedra a propósito, fuerte y lucido, con su reja de hierro, que todo adornaría mucho la dicha iglesia y claríades por el sitio para hacer la capilla y altar y por el romper de la pared, aunque a vuestra costa, seiscientos o ochocientos maravedís al año”.
- El 11 de junio de 1615 el párroco de Pozuelo licenciado Francisco de Torres Campos y el mayordomo de la iglesia Gaspar L(l)orente, dieron al presbítero Húmera “un sitio en el templo para hacer una capilla para el enterramiento de éste, ornada con las insignias y aderezos que le pareciere, poniendo en ella altar, retablo, reja y bóveda para su sepultura”.
- El 20 de marzo de 1616 el protonotario firmó un contrato para romper la pared del templo y hacer la puerta y arco de piedra berroqueña de Galapagar de la entrada de la nueva capilla, con Domingo Gil y con Pedro Gutierrez, vecinos de Madrid, oficiales y maestros de cantería.
- El 11 de noviembre de 1619 pagó 283 reales a Santiago de Zárate pintor “por lo que trabajó en la capilla”.
- La partida de defunción del protonotario Húmera se encuentra en el libro de difuntos que comprende desde el año 1619 al 1671, folio 5 vuelto, archivo de la parroquia de Pozuelo de Alarcón.
Fue enterrado en la cripta de la capilla que él había mandado construir y financiado. Se accedía a esa cripta por una escalera.
- El 17 de julio de 1620, poco después del fallecimiento del protonotario Húmera, los patronos de las memorias y obras pías que fundó el protonotario pedían “un traslado del epitafio y letrero que está encima del sepulcro donde está enterrado el dicho licenciado Francisco de Úmera (sic), por dentro de la dicha capilla que ansí fundo, donde está hecha mención de las dichas obras pías y otras cosas dependientes de lo que se trata”.
Este letrero y epitafio fue solicitado por el obispo de Troya, don Melchor Soria y Vera, auxiliar del arzobispo de Toledo y visitador del arcedianazgo de Madrid, en su visita pastoral a la parroquia de Pozuelo el 16 de abril de 1622.
En el sepulcro del protonotario fueron también sepultados los restos de su madre y de su hermana Catalina.
- También se refiere a lo mismo la visita pastoral a la parroquia de Pozuelo en el año 1734, siendo párroco don Diego García Medrano, natural de Robledo de Chavela, quien posteriormente fue consagrado obispo de Segovia, con muchas propiedades de fincas en Pozuelo.
- Al construir el nuevo templo parroquial en 1940 la capilla donde estaba enterrado don Francisco de Húmera y su familia se encontraba arruinada. En lugar de restaurar la escalera de acceso a la cripta se optó por soterrarla y así las sepulturas de la familia y las lápidas que las cubrían fueron ignoradas e ignoradas siguen. Tampoco se hizo nada por recuperar el altar y retablo de la capilla”.
Y las preguntas sobre el tema son varias:
¿Qué hará el Gobierno con ese estudio de don Ángel Montero Sánchez sobre Francisco de Húmera? ¿Lo publicará o lo esconderá en un cajón?
¿Tendrá la alcaldesa Quislant el valor político de financiar los estudios y las obras pertinentes para rescatar los restos mortales del protonotario pozuelero y restaurar la cripta donde está enterrado?
El Capitán Possuelo