La insensibilidad social del Gobierno de Pozuelo obliga a una familia de las viviendas Coca a reformar su casa para adaptarla a discapacitados
Hacía tiempo que no se hablaba de las viviendas Coca. Da la sensación de que sus vecinos asumen su “muerte”, aunque no acaban de creerse la prometida “resurrección” del Gobierno.
Y es que cuando no es una cosa, es otra la que prueba esta desconfianza.
La última ha sido vergonzante.
Me cuentan que una familia que lleva 50 años viviendo una de sus casas, en la que hay dos personas discapacitadas, ha tenido que adaptar su casa a esos problemas y que, tras comunicar el problema a la Concejalía de Servicios sociales y solicitar una ayuda, la concejalía de Beatriz Pérez Abraham se la negó.
Ante la imperiosa necesidad de adaptar la casa, ha sido la propia familia la que ha corrido con los gastos de esa adaptación. Me hablan de casi 6.000 euros.
Recuerdo que la casa es del Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón y que la concejala gana 70.700 euros al año más los gastos sociales. A lo que hay que sumar lo que gana Belén Mingo. Ay, los servicios sociales de Pozuelo, Corazón de Piedra.
Seguiremos informando…
La Piraña del Meaques
Estimado/a Piraña, vaya por delante que ningún vecino de Coca, da por muerto nada y cierto es que nadie a día de hoy se cree nada que venga del ayuntamiento, no hay voluntad política por resolver el tema de una vez y para siempre, y por el contrario si que la hay para tener sometidos a los vecinos, a los desmanes de la concejalia de asuntos “varios” que no sociales, aquí se han cometido autenticas tropelías, como subir el alquiler a mujeres viudas por el hecho de traspasar a su nombre el contrato, al fallecer su marido, cobrar mediante subida del alquiler, el revocado y posterior pintado de las fachadas, solucionar problemas en viviendas y a otros denegarles esas mismas mejoras, según las normas aprobadas en pleno, estas viviendas son para acoger a familias desfavorecidas y en riesgo de exclusión y sin embargo, se adjudico una vivienda a dos empleados del ayuntamiento, con la consecuente renovación de la vivienda por parte de operarios municipales y cuando una familia solicita un cambio de vivienda por motivos de movilidad de alguno de sus miembros, las obras de adaptación y renovación van por cuenta del peticionario, a todo esto se añade la inoperancia de la asociación de vecinos, por la usurpacion del cargo por parte de una señora que ni es vecina, ni vive en Coca y que vulnera la norma de la asociación en su reglamento y normativa, (lleva sin convocar elecciones mas de dos años), actúa en nombre de la asociación, sin tener capacidad legal par atal cometido, pero eso tiene solución, el problema mas sangrante, es que hay viviendas vacias y si alguien las solicita, no se las conceden aun siendo parejas jovenes con hijos y teniendo que vivir separadas, por falta de medios económicos, y asi podriamos estar hasta agotar la tinta del Quijote, un saludo.
Muchas gracias por su participación. Saludos