La campaña del presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, para acercarse al público en directo ha pinchado de manera estrepitosa. Ha realizado solo doce actos de partido y, sobre todo, con militantes en los últimos cuatro meses del año 2022. Además, tras los abucheos en actos abiertos, en la mayoría impone restricciones al público.

La cifra se queda lejos de lo anunciado por la dirección socialista el pasado verano, cuando adelantó que Sánchez mantendría una treintena de actos con militantes hasta final de año, de los que ha cumplido el 40 por ciento.

Según trasladaron entonces desde Ferraz, el objetivo era recuperar el contacto directo con la ciudadanía para explicar las medidas que estaba tomando el Gobierno, así como los planes de futuro del Ejecutivo, con una nueva campaña bajo el lema ‘El Gobierno de la Gente’.

A este respecto fuentes de la dirección socialista señalan como excusa a Europa Press que desde un principio esta serie de actos ya se condicionó a la agenda internacional del presidente, que ha sido muy intensa en los últimos meses.

Ellos consideran, sin embargo, que su desarrollo ha sido un «éxito» porque querían que toda la organización se implicase en la explicación de las medidas, desde el secretario general a los concejales o las agrupaciones locales, y ven que ha sido así. Por tanto, se muestran satisfechos con el desarrollo de la campaña y adelantan que la próxima semana se llevarán a cabo más acciones bajo el marco de ‘El Gobierno de la Gente’.

MOSTRAR PARA QUIÉN GOBIERNAN

La idea consistía, según indicaron fuentes socialistas el pasado verano, en llegar a «todos los rincones de España para explicar lo que estamos haciendo y lo que vamos a hacer», con contacto directo con los ciudadanos, y demostrar que están gobernando para el 95 por ciento de la sociedad.

El PSOE pretendía mostrar así el giro a la izquierda anunciado por el presidente en el Debate sobre el Estado de la Nación celebrado en julio, en el que anunció nuevos tributos a la banca y las compañías energéticas.

Buscaban también pasar página después de unos meses marcados por el alza en las encuestas del presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, la dura derrota en las elecciones andaluzas de junio, y la remodelación interna tras la salida de la Ejecutiva Federal de la vicesecretaria general, Adriana Lastra y el recambio de portavoces en el partido y en el Congreso.

PRIMER ACTO EN SEVILLA

El primero de esa serie de actos se llevó a cabo en Sevilla, el 3 de septiembre, con el inicio del nuevo curso político, junto al alcalde de la capital andaluza, el también socialista Antonio Muñoz. En su intervención Sánchez puso el acento en los vínculos existentes, a su juicio, entre el PP y las grandes empresas energéticas.

Además al finalizar su discurso, respondió a las preguntas de algunos de los asistentes acerca de la inflación, las medidas del Ejecutivo o la sequía que afecta al país y a Andalucía.

También en septiembre, Sánchez acudió a un acto con militantes y simpatizantes socialistas en Toledo, al que también asistieron el presidente de Castilla La Mancha, Emiliano García Page y la alcaldesa de la ciudad, Milagros Tolón. Esa misma semana estuvo en Zaragoza, donde el partido reunió a su plana mayor en el Consejo Político Federal, en el que están los presidentes autonómicos y los secretarios generales.

CANCELACIONES POR COVID

En octubre, Sánchez presidió mítines en Getafe y Soria y presentó la exposición sobre los 40 años de la victoria del PSOE en las elecciones generales de 1982 junto a los expresidentes Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero y el exsecretario general, Joaquín Almunia. Además, protagonizó con González un mitin en Sevilla para recordar aquella mayoría absoluta que abrió una etapa de 14 años de gobiernos socialistas en La Moncloa.

Ese mismo mes tenía previsto acudir a sendas celebraciones de la fiesta de la rosa en Gavá (Barcelona) y en Galicia, pero se vio obligado a cancelarlo al resultar positivo en Covid.

Posteriormente, ya en noviembre, Sánchez se desplazó a Vitoria y Baza (Granada) y en Madrid, estuvo presente en un homenaje que el PSOE rindió a la escritora Almudena Grandes en el Ateneo de la capital. Por último en diciembre acudió a sendos actos en Valencia y Barcelona en los que estuvo acompañado por los líderes socialistas en cada comunidad, Salvador Illa y Ximo Puig, respectivamente.

INTENSA AGENDA INTERNACIONAL

El jefe del Ejecutivo se ha quedado lejos de cumplir las expectativas generadas por su partido en este sentido, aunque ha estado limitado por una apretada agenda internacional a lo largo de todo el último trimestre. En septiembre acudió a Nueva York a la Asamblea General de Naciones Unidas, en octubre asistió a la cumbre hispano alemana junto a su homólogo Olaf Scholz en La Coruña y realizó un viaje oficial de varios días a Kenia y Sudáfrica.

Al mes siguiente viajó a Viana do Castelo (Portugal) para la cumbre hispano portuguesa junto al primer ministro Antonio Costa y se desplazó a Indonesia para participar en la cumbre del G20, para después rematar la gira asiática en Corea del Sur. Además Sánchez fue designado presidente de la Internacional Socialista en un congreso celebrado en Madrid durante varios días.

Finalmente, en diciembre fue el anfitrión de la Cumbre Euro mediterránea Euromed 9 que se celebró en Alicante y ya en fechas navideñas hizo un viaje relámpago a El Líbano para visitar a las tropas españolas.

(Gentileza de Madridpress)