El Gobierno de Sánchez carece de credibilidad: Ataca a Ayuso por cuestionar su plan de ahorro mientras se ‘morrea’ con los separatistas catalanes y los filoterroristas vascos

Hasta tres ministras han contestado ya a la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso después de que ésta manifestara en redes sociales su negativa a aplicar en su territorio el plan de ahorro energético del Gobierno central.
La titular de Industria, Comercio y Turismo Reyes Maroto ha criticado a Ayuso por su «visión egoísta e insolidaria» ante las medidas del plan. «Las declaraciones de Ayuso son desafortunadas, tiene una visión egoísta e insolidaria, muy lejos de la realidad que estamos viviendo», comentó la ministra en ‘La hora de la 1’.
Por su parte, la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica Teresa Ribera pidió «responsabilidad de alguien que está al frente de una institución para decidir si se rebela contra las normas o los compromisos europeos», en alusión a Ayuso.
En una entrevista en ‘Telecinco’, comentó que «no es algo a tomarse con frivolidad» y que, «como madrileña», no quiere que la vean «como una pequeña aldea gala que, junto con Orban, se alía con Putin».
En declaraciones en ‘Antena 3’, afirmó que «cada cual se retrata con sus palabras y hechos».
Ayuso también fue respondida por la ministra de Derechos Sociales Ione Belarra, la comunista líder de Podemos. Belarra tachó en ‘RNE’ de «enormemente irresponsable» este tipo de posturas y espera que la ciudadanía responda con «más compromiso que gobernantes que no están a la altura de la circunstancias».
Isabel Díaz Ayuso es la enemiga a batir por haber sido la única política que ha cuestionado las medidas más abracadabrante del último Consejo de Ministros antes de las vacaciones relativas al ahorro energético.
En palabras de Alvaro Nieto en The Objetive:
«El Gobierno va a imponer por ley no sólo la temperatura a la que tienen que poner la refrigeración todos los edificios públicos, sino también los comercios, cines y hoteles.
Además, el Ejecutivo decreta que las luces de los escaparates y monumentos se apaguen a las 22 horas.
Con la excusa del ahorro energético, el Gobierno vuelve a meterse implacablemente en la vida de los ciudadanos, diciéndole a El Corte Inglés, por ejemplo, a qué temperatura tiene que poner el aire acondicionado a sus clientes hasta noviembre de 2023. Se acabó lo de usar un comercio como refugio cuando el calor aprieta en el exterior: 27 grados en verano y 19 en invierno.
El problema es que este Gobierno es que ya no tiene ninguna credibilidad y se ha convertido en una caricatura de sí mismo. Es capaz de pedir a ciudadanos y empresas lo que él no está dispuesto a hacer. Nos piden apagar las luces a las 22 horas, pero nos lo reclaman desde una rueda de prensa que se celebra ¡a las 22 horas!
Pasó lo mismo la semana pasada cuando Sánchez se quitó la corbata por la mañana… y por la tarde asistió a un encuentro internacional con ese atuendo bien colocado. Definitivamente, nos toman por imbéciles.
«Las administraciones tenemos que ser las primeras en dar ejemplo», dijo con rostro muy serio la vicepresidenta Teresa Ribera.
Pues mire usted, señora Ribera, el mejor ejemplo de ahorro que daría su Gobierno sería anunciarnos que reducen el número de ministerios (el mayor desde los tiempos de UCD), la legión de asesores (la cifra más alta nunca vista en La Moncloa) o los trayectos en Falcon y Súper Puma del presidente.
Mientras eso no suceda, sus demandas de ahorro nos sonarán a tomadura de pelo».
Mientras, y esta misma semana por poner un par de ejemplos, Pedro Sánchez regala el Fuerte de San Cristóbal , cerca de Pamplona, a los filoetarras de Bildu por la aprobación de la Ley de Memoria Democrática y la desjudilización de la política a los separatistas catalanes por aprobarle los presupuestos…
Redacción