A modo de análisis: La desidia de la alcaldesa de Pozuelo y el desánimo del presidente de la Agrupación están condicionando la elección de compromisarios para el Congreso de Sevilla
Con las fechas del calendario del Congreso Extraordinario del PP (que se va a celebrar en Sevilla los días 1 y 2 de abril) pegadas en los talones (hoy, a las 20 horas, termina el plazo de presentación de candidaturas a presidir el partido y con la campaña de los candidatos empezando el día 11) no parece haber ambiente electoral en la Agrupación pepera de Pozuelo…
Y tampoco parece que los 10 días de campaña del candidato o candidatos (aunque todo apunta que será Alberto Núñez Feijóo) sirvan para nada. La campaña termina el día 20 de marzo a las 24 horas y el rumor que corre por las cercanías de la Calle de las Flores es de desidia y de desánimo. La desidia impuesta por Susana Pérez Quislant en el Ayuntamiento unida al desánimo crónico de Enrique Ruiz Escudero han calado entre los militantes y, hoy por hoy, no hay ambiente electoral. Es más, ya veremos si se consigue que tres afiliados (al corriente de pago) se presenten a compromisarios…
Porque esa es la clave.
Posiblemente, como hemos contado en El Correo de Pozuelo, si solo se presenta Alberto Núñez Feijóo no habrá elecciones presidenciales en las Agrupaciones pero si habrá elecciones a compromisarios y, ahí, la cosa flojea… Al menos por ahora. Hay como una especie de conformismo que navega entre esa desidia de Quislant y ese conformismo de ERE y eso es demoledor. Es como si lo que se está jugando el PP en ese Congreso y meses sucesivos no fuera con una militancia pepera cansada… “Qué lo arreglen ellos”.
Así que, visto lo visto, vayamos por partes, como diría Jack El Destripador, a analizar, sucintamente, la situación actual…
Para empezar, diré que a Susana Pérez Quislant, como alcaldesa y, por lo tanto, compromisaria nata, todo le resbala.
A ELLA le gustaría ser la única compromisaria que representase a Pozuelo. Le encantaría que no quisiera ir nadie. En los congresos hay muchos corrillos y con tres compromisarios pozueleros sueltos por los pasillos, corre el peligro de que a alguno se le pueda soltar la lengua y pueda hablar cosas que no debería sobre la mala gestión de Quislant en esta Villa. Y eso no le conviene.
ELLA va a Sevilla a lo que va. Como fue a Málaga hace tres años, cuando Isabel Borrego le presentó a Teodoro. Quien sabe si no lía a González Pons o a otro tontito como Egea y todo revierte. Y, dado que no le conviene que vaya nadie, Quislant no va a poner el más mínimo interés en que haya elecciones a compromisarios…
Lo suyo será estar a la espera para averiguar quién se presenta. Si no se presenta nadie, cartucho ahorrado… Si alguien se presenta, alguno de los suyos se presentará también. Incluso, si pueden ser dos, mejor (presentar a los tres se notaría mucho).
Y con dos candidatos suyos, sus asalariados con dinero de los vecinos se lanzarían a votarlos. Aunque, insisto, lo que ELLA quiere es que no vaya nadie de Pozuelo (dejaría también mal a ERE) por lo que no moverá un dedo… Como dije más arriba, no le conviene tener testigos sueltos por ahí…
Por otra parte, hay que decir que al menos Enrique Ruiz Escudero, como Presidente de la Agrupación, querrá ser compromisario. Lo quiso la ultima vez pero, en la votación, le ganaron Félix Alba, Yolanda Estrada y Paloma Lorenzo y lo dejaron mirando a Cuenca. Y, oiga, perder otra vez sería demasiado malo en estos momentos. Y es que si ni los afiliados de su Agrupación le votan, difícilmente, podría aspirar a la alcaldía de Pozuelo.
Es muy posible que se presente con alguno de los suyos… Aunque existe la posibilidad real de que llegue a un pacto con Quislant (no sería la primera vez) y, a cambio de no hablar mal de ella en el Congreso, que ELLA pusiese a dos de los suyos y que ya esté completo el trío de compromisarios…
Vamos, que entre ELLA y EL se repartiesen el bacalao… Y, entre los asalariados de Susana y los de Enrique, bingo…
¿Y qué medidas pueden tomar ambos para ello? Ninguna.
(“Quietos paraos. Que nadie sepa mi sufrir y los cuatro a Sevilla”).
Y el caso es que les puede salir bien. En este momento, no hay ambiente electoral ni de ningún tipo. Y, créanme, es de los más sospechoso porque estamos hablando del ser o no ser del Partido Popular, aunque Pozuelo solo aporte cuatro votos en el Congreso de Sevilla.
Pablo Casado y Teodoro García Egea lo han hundido en la miseria y Alberto Núñez Feijóo no tiene claro, ideológicamente, que haya que recomponerlo como partido de derechas para dar la batalla cultural… Feijóo está solo en el reordenamiento. Está más por ocupar el hueco político que deja Ciudadanos y eso es peligroso… El gallego no quiere a VOX ni en pintura. Pero, al menos a mí, eso suena a tancredismo político y estamos en el tiempo de las ideologías…
Si es eso lo que Feijóo quiere del PP de Pozuelo y los vecinos lo notan, el batacazo electoral que se pegó Quislant va ser de broma con el que se dará el próximo candidato a la alcaldía…
Salvo, claro está, que dejen a Isabel Díaz Ayuso la libertad de nombrar no solo al candidato sino al Presidente de la Agrupación… En ese caso, otro gallo cantaría… Y para eso también hay que dar señales desde Pozuelo… Y los afiliados pozueleros que quieran el cambio se deberían levantar y presentarse y ganar. Ganar para que, desde el día 21 de marzo, se empezase a ver su avidez de cambio. Porque, señores, este Congreso es más importante de lo que parece. Y hay que empezar a elegir. No se puede mantener este partido en Pozuelo en la desidia y en el desánimo.
Y tiene que ser tan fuerte que Ayuso lo note. Ella si quiere dar la batalla cultural y sabe que sin VOX vienen mal dadas en las próximas elecciones.
Peperos Pozueleros, levantaos… No dejéis que os atropellen la desidia y el desánimo que todo lo envuelve en esta villa…
Amén.
El Capitán Possuelo