Cuando el ego supera a la política, las consecuencias las pagamos los ciudadanos y Quislant es el ejemplo perfecto de la soberbia política de nuestros gobernantes municipales
La aparición en el programa de las “hormigas”, de la “cadena abierta”, del actual regidor de la ciudad olívica (Vigo para los alejados del Bachillerato) contando sus excelencias como gobernante municipal y como buen hacedor político populista (siempre con el yo por delante) nos puso de manifiesto un viejo dicho: “Dios nos libre de nuestros benefactores políticos, porque de sus ocurrencias, no se libra nadie”.
Solo le faltó decir al Sr. Caballero que la fábrica de Stellantis (apenas unos días atrás, CITROËN) la hizo él y no bajo el auspicio gubernamental de Franco. Tan demócrata es este alcalde que presumió de haber sido ministro con González, llegando a decir que está muy satisfecho del actual presidente expañol, Sr. Sánchez.
Qué curioso, hablar de libertad y democracia presumiendo de haber desarrollado funciones ministeriales con el mandatario propiciador “de los GAL” e ídem de lo mismo con el presidente socio de los herederos de ETA, nacional-socialistas y comunistas. Sin duda todo un canto a la coherencia y al buen hacer.
De sus luces de Navidad que iluminan el Universo, nada de nada por parte de los defensores del medio ambiente, porque son leds “que no consumen nada…” (nadiña que dirían en Vigo), pero oyéndole uno no acierta a imaginarse lo mismo si el alcalde fuese de derechas. Hasta Greta pondría el grito en el cielo, digo en Galicia.
Pero en Pozuelo también cuecen habas…
Nosotros, en Pozuelo, no íbamos a ser menos, poco importan unos millones de déficit, si somos ¿verdad Susana? el municipio más rico de Expaña y el presupuesto llega acompañado de la firma de Damián, cinco minutos antes de la desaparición naranja.
Luces vintage, cajitas más vistas que el trenecito de todas las navidades y, por supuesto, la pista de hielo y las voladoras en el parking del ESIC.
¡Innovación y sorpresa para toda la ciudadanía!
Ya estoy viendo la Cabalgata, ella de arriba para abajo en su recorrido, los concejales pendientes de la diva y algún que otro paje de la comitiva municipal.
Y venga a tirar caramelos que un poco más de déficit municipal no va a dejar de endulzarnos la Navidad.
Reconozcámoslo, nada se escapa a la desidia de Susana: Cemento para aparcamiento ecológico en el parque Adolfo Suárez, parques infantiles con riesgo para los infantes, La Estación abandonada y sucia, aunque todos los años dizque se invierte, Padre Vallet y Plaza Mayor cerrando a cal y canto los negocios…, si hasta en la Avda. de Europa “crece” la basura.
Sólo le falta visitar la Finca y que se deprecie la misma.
Y nadie, ni sus propios, ni los OposiAmigos mayoritarios dicen una palabra, porque en el fondo, todos quieren ser ella, pero alcaldesa sólo hay una. Y quién pone los sueldos marca las reglas del juego.
Será su penúltima Navidad y cuando parta de Pozuelo a nosotros nos dejará los números rojos, las oportunidades pérdidas y una ciudad que pudo haber sido y se quedó atrás…con un PP decepcionante, un VOX inexistente, un PSOE agotado y un SOMOS que no llegó a nacer. El naranja, que nunca fue un color, ya desteñido por el azul se integrará con los de Casado y vuelta a empezar.
Cómo se parecen todos y cuánto somos capaces de sufrir los ciudadanos…¿podrá ser el tiempo de Tono y sus Vecinos para obviar desgobierno y soberbia, recuperando nobleza y prestigio?
Y, mientras la nave se hunde, Melgarejo sigue en el puesto de mando. Lo que el dinero -y el partido- puede.
Qué hemos hecho para tanto mal…municipal.
Alejandre