El bochorno se viste de peñas pozueleras (6 ½ y El Botijo) en las Fiestas de Nuestra Señora de la Consolación de Pozuelo y que obliga a dimitir a varios concejales. Un artículo de Alexandre
Tanto fue el cántaro a la fuente que al final tuvo que romperse, llevando tras de sí todas las miserias y favores que nuestro Ayto. del PP traslada a las peñas locales, cuya razón de ser no son otras que su propio divertimento, ajeno al resto de la ciudadanía que con ellas no participa y, por supuesto, a los presupuestos municipales.
La R.A.E. define a las peñas como: “un grupo de personas que participan conjuntamente en fiestas populares o en actividades diversas, como apostar, jugar a la lotería, cultivar una afición, fomentar la admiración a un personaje o equipo deportivo, etc.“
No voy a entrar en los artículos de este periódico, aparecidos con razón del nombre de algunas, en mi caso recordando siempre lo que mi padre decía en relación a los mismos -los “más extraños”-: el nombre lo hace bonito la persona…, es decir, sus comportamientos y acciones, aquello tan bíblico de “por sus hechos los conoceréis”.
Como no quiero juzgar nombres ¡líbreme Dios!, si que describiré acciones, concretamente la que, desde El Correo de Pozuelo, todos los pozueleros hemos podido ver con motivo de las fiestas patronales de Ntra. Sra. de la Consolación…
No anticipaba nada bueno el programa, un año más, pues parecían las fiestas de las Peñas: hasta veinte actos distintos, incluyendo seis desfiles (lo mucho cansa, lo poco agrada…).
Lo que no imaginábamos es que fuera del Programa, quedaba la “sorpresa” y que retrata, al menos, a los partícipes de esa cabalgata-chirigota de un solo paso de paleta, zafia y grotesca con música de procesión cuaresmal que irrumpiendo y ocupando el espacio público, sirvió de burla y mofa a los pocos creyentes que ahora queden, denigrando al resto de vecinos que se puedan ver insultados con tal acto (distintas muestras ya ha habido, como ha apuntado el Capitán Possuelo).
No se les ocurrió cosa mejor a distintos integrantes de esas dos peñas que hacer una parodia de las procesiones de Semana Santa de un solo paso con la presencia de un jamón a modo de sacra figura.
Como no puede haber cortejo “festivo” sin comentarista oficial, ya para la historia de la radio-difusión pozuelera, esa voz que acompaña, dirige y organiza la charlotada aludiendo ora al escándalo de las abuelas al ver el “sacrílego” paso (no os preocupéis por ellas que ya conocen bien la necedad humana), ora al movimiento adecuado, cual paso del nazareno, ora reclamando la “policía”, ora a agacharse… Para el análisis…,comparar la payasada -perdónenme las nobles personas que dedican su vida a la sonrisa ajena – con la fiesta del cordero musulmán…
Sin duda, el vídeo subido a las redes sociales por los mismos partícipes, edificante, creativo y humorístico -imagino- para todos sus integrantes en su cara A y, en su cara B, ejemplo gráfico en blanco y negro de la realidad de nuestra ciudad y de sus cutre-fiestas patronales.
Reconozco que sale barato parodiar a los católicos. No digo ofender, porque eso lo realiza quién puede, no quién quiere y aunque no se merecen defensa alguna las almas de San Pedro (aún en mi recuerdo el actual arzobispo madrileño, diciendo que la profanación en la Complutense… fue una chiquillada de la recién casada Rita Maestre, por él perdonada), en esta ocasión espero que Don Mario, al menos y dado que alguno de los partícipes de la patochada gusta de portar las imágenes -visto el movimiento que encadenan, costumbre pueden tener- en las festividades sacras y, como penitencia, les impida ser nazarenos de las mismas, por respeto a los ciudadanos de Pozuelo ajenos al esperpento y muy particularmente por sus fieles. Sería ejemplarizante y educativo.
Pero no se hubiese podido llegar a esta situación si el Sr. Ulecia (concejal de fiestas) las hubiese programado para todos y con las demás fuerzas políticas. Es mejor, sin duda, apoyarse en las dádivas y el compadreo, para que luego ocurra lo acontecido. Dimite, Carlos, si te queda algo de dignidad…política.
Tampoco es menos culpable el Sr. Sampedro (concejal de seguridad) y, personalmente, la responsable de nuestra policía local, la calle ocupada y usurpada a los vecinos con una charangada, fuera de programa. Y demandando que se cortara la misma, por parte de la narradora…¡Ay Berlanga, vuelve! y llévate a Gerardo de actor, dado que tampoco se va.
No he escuchado nada de las responsables de Cultura y Juventud ante un paseíllo tan impropio, como poco edificante. Imagino que Almudena está escondida, porque el VPO ya la tendría que tener hace meses en casa, pero, Mónica ¿a ti te pareció cultural y edificante la comitiva? o, simplemente ¿parodia festivalera con ribetes iconoclastas?.
Y, por fin, la egregia alcaldesa, tan sorprendida, supongo, como callada, pero claro, cuando el presupuesto se utiliza para seguir mandando, llegan estas sorpresas y dejan a una en evidencia… y a su equipo. ¡Cuántas sorpresas nos depararás hasta el fin de la legislatura!
Desde luego, las peñas son muy libres de desarrollar las actividades que consideren, dentro del marco legal existente, eso sí: siempre con sus fondos, y, si consideran que la comparsa realizada es lo que demandan sus miembros y lo que mejor las define…, allá ellos y sus integrantes, aunque no creo que las patronales sean lugar adecuado para alabanza del jamón en forma y manera presentada… quedando retratadas, las dos partícipes, por su interpretación artística.
Lo que resulta inadmisible es que el Ayuntamiento, verdadero responsable de lo acontecido, un año más haga un programa no de fiestas, sino de Peñas -asociaciones privadas ajenas al conjunto de los vecinos y que no me parece mal tengan un espacio en las fiestas, acotado a lo que son y representan o puedan representar- y como en esta ocasión ha ocurrido con: El Botijo y el 6 ½ nos sorprendan con un homenaje al cutrerío que ofende a la inteligencia de muchos vecinos y, particularmente, por todos los signos externos utilizados, a los católicos.
¡Qué oportunidad para que cada cuál ocupe su espacio!…y dentro de siete meses, más o menos, el voto nos haga libres…¿o es la libertad la que nos hace personas?
Sigo esperando los comentarios del Consistorio y de la Oposición. Mientras, permítanme que me ponga colorado, dado que nadie se pone rojo.
PD: Véanlo, una vez más, para sonrojo o sonrisa.
Alexandre