Los magnates chilenos Lería-Luksic llegan a Pozuelo y se convierten en el tercer mayor propietario de suelo del Área de Reparto de Pozuelo Oeste (ARPO), según la prensa chilena
La compra de terrenos de ARPO la ha ejecutado la family office Wildsur, de Paola Luksic, a través de la gestora Osim, de Óscar Lería, tal y como ha corroborado éste magnate al diario chileno ‘La Tercera’.
Según este diario latinoamericano, ‘Hace tres años, el grupo puso sus ojos en el municipio más rico de España, que está justamente en Madrid: Pozuelo. Ahí había un sector en el que se estaba desarrollando un plan regulador para pasar de ser considerado rural a urbano. Pero los terrenos -que suman 200 hectáreas- ya tenían dueños: las inmobiliarias Priconsa, iKasa y Metrovacesa, ligada al Santander, y los bancos Sabadell y La Caixa, y otros actores pequeños.
Hicieron varios intentos, pero no lograban concretar. Eso, hasta el jueves 28 de junio pasado, cuando, después de pasar más de un susto de que se cayeran las negociaciones, finalmente firmaron la compra del paquete del que era propietario a La Caixa en 30 millones de euros (unos US$ 35 millones).
Aunque en el terreno total de ARPO, el nombre del sector, está proyectada la construcción de cuatro mil viviendas, Lería y sus socios podrán desarrollar 400 de ellas.
“Nosotros tenemos el 10%. Se nos asignan distintos lotes”, cuenta el empresario respecto del lugar donde podrán edificar viviendas libres para las que no existen límites establecidos y otras protegidas que son construcciones que tienen un precio máximo de 300 mil euros (US$ 352 mil).
Eso sí, para que eso ocurra, tendrán que esperar un tiempo y que se cumplan algunos procesos administrativos. Esto, porque aunque el plan regulador -que establece calles, áreas verdes, zonas comerciales y densidades, entre otros- ya está definido, lo que falta son “hitos urbanísticos” que aseguran harán que el terreno “valga mucho más”, como la construcción de un colector de aguas lluvias y la reaprobación del proyecto de reparcelación. “Hay una etapa de plusvalía”, explican respecto de este periodo que creen durará entre 1,5 y dos años.
“Cuando se cumplan los hitos y podamos hacer los edificios, vendrá la segunda parte del negocio, que es que tenemos que armar un grupo para construir. Ahí hablamos de una inversión de 200 millones de euros (unos US$ 235 millones)”, cuenta Lería respecto de una invitación que podrían extender a inversionistas chilenos o extranjeros, entre los que habría españoles y belgas con los que ya han hecho otros desarrollos. “Hay dos o tres que quieren entrar. La definición del porcentaje con el que nos vamos a quedar nosotros está por verse”, explica Lería’.