Tiene que haber una razón lógica: ¿El Presidente del Tribunal Económico Administrativo de Pozuelo podría ser la causa de la causa de la imposible solución de los problemas de esta villa?

Hace algunos años, me contaba un buen amigo, cómo había sido la elección de su mujer para ocupar un puesto de confianza en uno de esos entes creados por las Administraciones Públicas para realizar estudios y análisis y copiar informes de unos a otros.
La lucha y competencia había sido a muerte. Cruenta, incluso. Se ofrecía un buen puesto, con un buen sueldo y en un ente de absoluta solvencia.
Se presentaron cientos de candidatos. Personas con experiencia en puestos similares, abogados, economistas, políticos, sociólogos, con idiomas, con los mejores postgrados y máster,…en resumen, todas sobradamente preparadas.
La ganadora fue la mujer de mi amigo. Recién licenciada en Derecho, sin ningún postgrado, sin saber ni papa de ningún otro idioma, y por supuesto, sin ninguna experiencia.
¿Y eso cómo fue posible?
Muy fácil. Y ella lo sabe porque fue ella misma quien archivó esa documentación. Al final de su currículum vio como estaba escrita la siguiente anotación “viene por…”.
Por supuesto, el nombre que venía a continuación -gran amigo de ellos- era tan importante que a la mujer de mi amigo la bastó para ser nombrada y ocupar ese puesto.
Nada más o nada menos, como Uds. lo quieran ver pero con eso fue suficiente. Viene por Fulanito de tal.
Viene todo esto a cuento de que esta semana hemos descubrimos que nuestro Ayuntamiento nombró, en el año 2017, Presidente del Tribunal Económico Administrativo al que había sido profesor de la asignatura en que la Sra. Cifuentes suspendió, no se presentó, repitió o aprobó en diferido –nunca sabremos la verdad- tres años después, en el máster realizado en la Universidad Juan Carlos I.
No tengo ninguna duda de que este Sr. Pablo Chico de la Cámara está sobradamente preparado para ocupar dicho cargo. No, no tengo ninguna duda. Pero tal y como sucedieron las cosas, de manera unilateral y sin ninguna concurrencia, sospecho que al final de su currículum podía poner “viene por…”. Y con eso fue suficiente para nombrarle.
Y ese “viene por…” –como muchos otros que hay en la Casa Grande de Pozuelo- es lo que me puede hacer entender porque jamás se toman medidas contra el Gobierno de nuestro Ayuntamiento.
De qué nos vale denunciar y reclamar a la Sra. Cifuentes o al Dr. Garrido que pongan seriedad en el Gobierno de Pozuelo, si esto es como el chiste del dentista “verdad, Doctor, que no nos vamos a hacer daño…”
Lamentable, pero es así. O, al menos, por algo parecido.
Demetrio de la Guerra