El “Bus Búho”, en las Patronales de Pozuelo, o como demostrar fehacientemente que el dinero público no es de nadie
Tranquiliza saber que entre los grandes ministros que en su día nos dio a la ciudadanía, el Sr. Zapatero, al menos en el caso de la Sra. Calvo, su frase quedaría para la posteridad y, nada mejor que repetirla a través de actos y acciones por otros mandatarios públicos, con el único objetivo, imagino yo, de no dejarla sola ante tal dislate.
Barrunto que nuestras desgracias y complejos, frutos de tanta idiocia y acomplejamiento, claro en las huestes azules y más oculto en las del puño y la rosa, provienen de cuando en nuestro Imperio, no se ponía el sol y ahí entre las imprentas, nacientes, que nos atacaban desde fuera y las guerras de religión que nos tildaban de todo…, nos fueron llevando hasta el óbito final con las pérdidas de Cuba y Filipinas, gracias a las tretas Useñas, haciéndonos recordar que, al contrario que la famosa frase de los aficionados del Liverpool, en Expaña: siempre caminaremos solos…y así nos va.
Tenían que llegar nuestras Patronales, cada día más las del Centro, para que a través de la revista pepera, perdón, del Vive Pozuelo tras cantar las excelencias de la transparencia Consistorial, nos encontrásemos con el Servicio Especial y gratuito de autobús, durante los fines de semana de las Fiestas del Centro.
Tres días, tres, de madrugada y con un único recorrido. Los vecinos que no tengan la tarjeta de transporte, podrán deleitarse con un viaje nocturno por el módico precio de : gratis total. Imagino que, a los usuarios de la misma…,algo les devolverán (¿o no lo habían pensado nuestros sesudos concejales?).
Habrá, eso sí, que vivir próximos al recorrido que, imagino y pronto nos lo explicarán, habrá sido analizado escrupulosamente para validar la necesidad del servicio. Será bueno conocer, por otra parte, qué pensarán los vecinos de otras zonas, no afectadas por el itinerario establecido, quedando excluidos de tanta magnanimidad pública.
Personalmente estoy dolido, porque en las recientes fiestas del Carmen, estoy seguro, que si dispusiésemos de líneas nocturnas abiertas y GRATUITAS, retornaría el esplendor de las de antaño y nuestro “Casco” de La Estación, ¡recuperaría los días de vino y rosas!
A la oposición me gustaría demandarles su opinión sobre este neonato Servicio, si han participado o no en su puesta en marcha y, por supuesto, amén de los estudios previos para su ejecución, les trasladen las preguntas que todos los pozueleños nos hacemos, ante tal dislate: ¿cuál es el coste de la operación?, ¿cuántas personas lo han utilizado?, ¿cómo lo han valorado los vecinos que han dispuesto de tal oportunidad?… y, por último, y no menos importante, aunque como los dineros públicos no son de nadie: ¿en qué partida presupuestaria está incluida el “Buho Nocturno Fiestas del Centro”?
Estamos en el Consistorio de las ocurrencias y cada día hay una nueva, el problema es que las mismas salen de nuestros Impuestos y el Bus nocturno, sumado a la calderetada popular (dos mil raciones…) y demás panegíricos durante estos días de juerga y desenfreno, una vez más nos llevan al terreno del voto y no al de utilizar los recursos con el único objetivo, hablando de celebraciones, de trasladar la ocasión del divertimento y la tranquilidad a los visitantes, con la sana idea de regresar en las próximas. Ese tiene que ser el objetivo del equipo Municipal, pero para eso, tienen que retornar a ser Patronales y no las del Centro.
Estamos, ya, en el camino final para la elección nuevo equipo gestor azul de Pozuelo, con las elecciones llamando a la puerta y me temo, visto lo que en nuestra villa venimos sufriendo con el equipo de la gaviota, que nos queda, aún, mucho por sufrir. Sin embargo, lo que realmente nos tiene que preocupar, es el futuro que se avecina ante las opciones del PP en el Consistorio, recordado por nuestro refranero patrio tan agudo y previsor: “otro vendrá que bueno te hará”, o lo que es lo mismo: acabaremos echando de menos a Susana, incluso, sin conocerla la mayoría.
Al tiempo…pero sin Bus Búho festivo…regalado.
A. Nogueiro