El famoso y polémico gluten no es tan malo ni tan inocente pero ha puesto a la Medicina al límite de su capacidad. Un artículo del Dr. Juan José Granizo
El gluten ha puesto a la Medicina al límite de su capacidad. Tradicionalmente, asociábamos el gluten a la enfermedad celiaca, pero desde hace 25 años las evidencias indican que hay pacientes que mejoran al retirar el gluten de la dieta, pero que no cumplen los criterios de diagnóstico de enfermedad celiaca. Algo estaba fallando…y ahora atisbamos la solución.
Pero empecemos por el principio. El gluten es un conjunto de proteínas de origen vegetal. Forma más del 90 % de las proteínas de los cereales de secano de cultivo tradicional en Europa: trigo, cebada, avena, espelta y centeno.
El gluten tiene dos componentes: la glutenina y la gliadina (que es la implicada en la enfermedad). La consistencia elástica y esponjosa que caracteriza al pan es consecuencia del gluten y de ahí su uso en la industria alimentaria.
En el estado actual de la ciencia, sólo hay tres enfermedades asociadas al gluten, lo que podría cambiar por que estamos en el filo de lo que la medicina sabe.
La primera patología es la enfermedad celiaca. No es una alergia como podemos entender la alergia al polen. Es una enfermedad autoinmune mucho más compleja, grave y con afectación del intestino y de otras partes del organismo (como la piel).
Se suele manifestar en niños de 1-3 años y menos frecuentemente en adultos de 30-50.
Los síntomas principales son diarrea crónica, dolor y distensión abdominal y pérdida de peso junto con retraso en el crecimiento. En adultos los síntomas son completamente dispares lo que retrasa el diagnóstico por que se suele diagnosticar tras descartar cualquier opción más probable.
Es una enfermedad con clara base genética y cuyo tratamiento descansa en eliminar el gluten, lo que es complicado por que los cereales son la base de la dieta y sus harinas son aditivos habituales en multitud de alimentos procesados.
La segunda enfermedad asociada al gluten es la Alergia al Trigo, que es una alergia convencional relativamente rara. Sus mecanismos celulares son completamente distintos a la enfermedad celiaca, pero los síntomas digestivos son similares a ella.
El tercer cuadro, que está todavía en una fase incipiente de definición y diagnóstico es Sensibilidad al Gluten no Celiaca, es una enfermedad para la que la comunidad médica aún no tiene criterios de diagnóstico ni causas.
De hecho, se sospecha que no es el gluten, si no otro componente de los cereales el causante… Su diagnóstico se hace cuando se descarta la enfermedad celiaca pero la retirada de los cereales consigue eliminar los síntomas.
Como puede deducir de lo leído, el diagnóstico no es fácil así que si sospecha que puede tener algún problema con los cereales consulte con su médico. Eliminar el gluten de la dieta es complejo y caro. Si lo necesita, hágalo con fundamento.
Las enfermedades relacionadas con el gluten en adultos son grandes simuladoras. He visto desde cuadros de falta de plaquetas hasta sangrados intestinales masivos. El diagnóstico de un médico es fundamental.
Para las personas que lo toleran, el gluten es inofensivo. Retirarlo de la dieta no mejora la salud. El gluten no es la causa de todos los males. Los cereales llevan con nosotros desde que existe la especie humana. Si fueran tan nocivos, ya nos habrían exterminado.
Juan J. Granizo, Doctor en Medicina, especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública