Heidi Klum sin maquillar y sin sujetador: ¿el ángel caído o todo lo contrario?

Las instantáneas han abierto el debate: la envidiable estética de Heidi a sus 43 años, pero en versión natural y espléndida, sin retoques, estilistas ni Photoshop, y sin sujetador, no tiene mucho que ver con las habituales fotografías de estudio, preparadas, iluminadas, con maquillaje profesional, con retoques y… Con el pecho sujeto por maravillosos sostenes casi mágicos.
La ley de la gravedad descubierta por Isaac Newton hace casi cuatro siglos se mantiene vigente incluso para las modelos alemanas con genéticas inconcebibles: eso es una buena noticia para el resto de las mortales. Pero lo mejor es que la propia Heidi Klum se muestra sin problemas con adorable naturalidad ejerciendo de madre a sus 43 años: cara lavada, pelo recogido, ni rastro de maquillaje, vaqueros rotos por la rodilla como toque de moda y camiseta de algodón blanca sin sostén dejando adivinar sus pezones a todo el mundo, empezando por su ex, el cantante Seal y padre de sus hijos, con el que coincidió. Una de las hijas, adoptada por Seal, es de Flavio Briatore, aunque nunca la reconoció.
Regresando a Newton: el pecho de la maniquí, sin ayuda de lencería, luce a una altura lógica para su edad y después de haber parido a cuatro criaturas. ¡Es humana! Eso exclaman ahora admiradores y revistas de moda especializadas. ¿EL ángel caído? Mejor: Heidi puede ser la modelo perfecta pero también una persona que sale con sus hijos sin arreglarse demasiado y sin preocuparse de que su belleza vaya acorde con la edad. El 30 de septiembre de 2010, anunció que dejaba de desfilar para la marca de Victoria’s Secret, tras trece años y cuatro hijos desde que comenzó a trabajar para la firma de ropa interior. No es Ángel de Victoria desde hace seis años pero es una máquina de hacer dinero.
En 2007 Forbes la nombró la tercera modelo que más gana en el mundo. Eso fue hace casi diez años. Ahora la alemana no solo es modelo: ejerce como presentadora, empresaria, diseñadora de moda, productora de televisión y hasta actriz. Si bien se dio a conocer por desfilar para Victoria’s Secret, marca gracias a la cual se convirtió en uno de los primeros Ángeles, sus posados para revistas como Sports Illustrated la convirtieron en referencia mundial de las Top, lo que la llevó más tarde a aparecer en varios programas de televisión, incluyendo CSI: Miami, Spin City y hasta Sexo en Nueva York.