Suele pasar: el Orgullo no hizo caso a Carmena y, en su desmadre, produjo el doble de basuras que el año pasado

(07-07-15) El barrio de Chueca y buena parte del resto del centro amanecieron el domingo toneladas de basura en la calle y un fuerte olor a pis. La celebración de decenas de miles de personas en la manifestación del Orgullo Gay y la posterior juerga en los locales, vías principales y plazas de la zona habían dejado su huella.
La alcaldesa Carmena Manuela Carmena les pidió que utilizaran las papeleras y recogieran «todo». Los barrenderos municipales han tenido que retirar de las calles y plazas 296.170 kilos de basura, más del doble de la cantidad de desperdicios que se recogieron el año pasado.
Según el Ayuntamiento de la capital, este dato «da idea del nivel de afluencia y participación» a las ya tradicionales fiestas del barrio de Chueca. Sin embargo, el millón de personas que han querido reivindicar de forma festiva los derechos del colectivo homosexual es una cifra similar a la de ediciones anteriores.
Desde las 18.00 horas del sábado a las dos de la madrugada del domingo, huno de todo. Los 105 sanitarios del Samur-Protección Civil atendieron a 112 pacientes por mareos, caídas e intoxicaciones etílicas, la mayoría de carácter leve. Dos de ellos tuvieron que ser ingresados con pronóstico grave tras haber consumido drogas.
De la seguridad se encargaron 304 agentes de la Policía Municipal, 40 de ellos para vigilar la venta ambulante. Pero venta ambulante hubo. Hacía calor por la tarde y los propietarios de carritos de la compra atiborrados de cervezas frías comercializaban su producto en pleno paseo del Prado sin contratiempos.
Todo muy cívico y organizado.