La concejala Isabel González, según su firma

(03-02-15) Lo primero que hacemos al ver una firma es observar si se puede leer el nombre y el apellido de la persona estudiar en ella. Para nosotros es fundamental porque eso nos posiciona muy claramente sobre su personalidad.
En el caso concreto de la concejala Isabel González no es del todo posible. En su firma nos encontramos con la I inicial del nombre, solamente, y la G del primer apellido, pero semilegible ya que no están todas las letras.
Posiblemente, el que no lleve todas las letras esté motivado por ser una firma de trabajo y la sintetice por rapidez. Como es natural, al no poner el nombre completo, nos demuestra que preserva su intimidad personal y se muestra sólo a nivel social.
También señala, con este rasgo, que es alguien hábil para salir de cualquier tipo de situaciones.
Las mayúsculas que Isabel usa en la firma son sobrealzadas, lo que potencia el idealismo, la imaginación y el orgullo personal. Esta característica del gesto significa que da importancia al mundo de las ideas y la creatividad pero también de orgullo.
Es una máxima de la grafología. Cuanto mayores sean las letras de la firma, mejor concepto de sí misma tendrá la persona que la hace.
Hay un predominio de curvas. Un gran predominio. Y eso es sinónimo de sociabilidad aunque, curiosamente, en las dos mayúsculas hay al empiece y al final un pequeño arpón. Un gesto que demostraría, por un lado, tenacidad de tipo intelectual (a González le gusta innovar, comunicar y adoctrinar) y por otro, terquedad y obstinación a la hora de defender su punto de vista.
Si nos fijamos, la última letra termina en un rasgo horizontal. Eso determina autodominio al actuar, ecuanimidad, fidelidad a sus propósitos y, sobre todo, lealtad.
También es una firma ascendente lo que significaría iniciativa innovadora, espíritu emprendedor, confianza en el éxito y buena salud.
En cuanto a la rúbrica, la concejala la hace ascendente y subraya las letras, lo que representa a una persona sociable, extrovertida y emprendedora con capacidad de reaccionar ante las adversidades y, desde luego, con deseos de superación.
Nos gustaría tener la firma completa y, como hemos dicho alguna vez, un texto escrito a mano para poder afirmar con más rotundidad todo lo que se observa en esta firma de trabajo.
Colectivo Radiónica