La reunión poselectoral de Vox Pozuelo fue una película del oeste de Serie B: Tuvo al ‘malo’ llamado Fernández, a la ‘buena’ llamada Ainhoa y a un grupo de ‘feos’ afiliados muy cabreados
El miércoles pasado, la dirección de Vox Pozuelo convocó a los afiliados del partido en la villa para hablarles de los resultados electorales habidos el 28 de mayo…
Conociendo al coordinador, todos los asistentes estaban seguros de que se había tardado tanto en convocar la reunión para enfriar a los afiliados por los malos resultados obtenidos ya que, lo vendan como lo vendan, fueron un fracaso. Bueno, como en toda la Comunidad de Madrid. Un fracaso sin paliativos.
En Pozuelo, después de 4 años en el Ayuntamiento y con la extrema izquierda y la izquierda extrema acabada, no se pueden tener los mismos concejales. Más votos, sí, pero las manos, en los Plenos, las levantarán cuatro concejales de Vox (dos son los mismos que fracasaron la legislatura anterior) el mismo número de la legislatura anterior. No se había avanzado nada. Mientras, el PP conseguía una mayoría superlativa.
En la anterior legislatura, Vox Pozuelo podía haber hecho una importante labor política que hubiese lanzado al partido pero lo impidió la torpeza política de su coordinador… En esta, va a ser un sufrimiento porque los concejales van a ir al Pleno a cazar moscas.
Pero volvamos, con un buen trávelin, a la reunión… Y digo trávelin porque la reunión terminó siendo una película del oeste de Serie B, cuyo reparto lo formaban el ‘Malo’ (Ignacio Fernández), la ‘Buena’ (Ainhoa García) y un grupo de ‘Feos’ afiliados muy cabreados…
Cabreados pero educados. Por eso, cuando habló la candidata (“buena”) a la alcaldía diciendo, entre otras cosas, que “Vamos a seguir en la calle, escuchando a nuestros ciudadanos y atendiendo todas las necesidades que nos transmitan, porque solo así es como debe desarrollarse la política municipal y les animo a que todos participen con nosotros para construir un futuro mejor para Pozuelo de Alarcón. No defraudaremos a la ciudad, y aquellos que nos han dado su confianza no se arrepentirán”, y los “feos”, al oírla, tuvieron piedad.
La piedad solo es patrimonio de los grandes hombres. Pero una cosa es tener piedad con quien lo merece y otra es tener las tragaderas abiertas con el ‘malo’ Fernández como las tuvo en los dos primeros años de la pasada legislatura.
Y en cuanto llegaron las preguntas, empezó el “tiroteo” contra dicho ‘malo’…
Un tiroteo en forma de duras críticas (por activa y por pasiva) de la inmensa mayoría de los ‘feos’ afiliados asistentes…
– “No me representas, Ignacio, no vales para nada.
-Dimite, Pozuelo no te admite.
-Me has engañado.
-Qué desastre de partido has creado…
-No has hecho nada bien”.
Aquello era una escabechina…
Pero el ‘malo’ Fernández, no decía una palabra. Se quedó mudo. No sabía dónde meterse. Pero aguantó. Un compañero me dijo que a Ignacio le daban igual las críticas. El es de los que dicen: “Dame pan y llámame perro”.
La ‘buena’ Ainhoa, sin experiencia, no sabía qué hacer. Pero aguantó el tirón…
Al final, quedó, relativamente claro, que todos los ‘feos’ la apoyan y creen que será una buena portavoz del Grupo Municipal en el Ayuntamiento.
Otro compañero dijo: “Como no van a ser nada en el Ayuntamiento y en el Pleno y todo será cosa de la portavoz, que a los tres concejales electos los dejen con una disponibilidad del 25%. No se les necesita más que ese tiempo.
Y si se cabrean y dimiten, mejor”.
En definitiva, una película para olvidar.
Fin.
Juan Pozuelo