La familia de José Antonio Primo de Rivera exhumará sus restos del Valle de los Caídos y dejará a este Gobierno necrófilo de Pedro Sánchez sin otro show profanador
Los restos de José Antonio Primo de Rivera serán desenterrados con motivo de la aprobación de la Ley de Memoria Democrática, pero lo importante aquí es cómo la familia se ha adelantado al Gobierno de Pedro Sánchez para dejarles sin su premeditado show profanador…
El duque de Primo de Rivera, Fernando, representante de la familia, ha anunciado en un comunicado la solicitud de exhumación de los restos de José Antonio Primo de Rivera. Por ello, la familia ha pedido permiso al abad del Valle de los Caídos y a la Dirección General de Salud Pública de la Consejería de Salud de la Comunidad de Madrid.
Una vez aprobada la autorización, donde se justifica:
«Los restos serán depositados en el lugar que la familia ha decidido. De esta manera cumplimos la voluntad manifestada en su testamento por José Antonio Primo de Rivera, cuya cláusula establece: ‘Deseo ser enterrado conforme al rito de la religión Católica, Apostólica, Romana, que profeso, en tierra bendita y bajo el amparo de la Santa Cruz’».
En el mismo, se especifica que, la familia del fundador de la Falange Española, busca realizar una exhumación en la «estricta intimidad familiar, sin que pueda convertirse en una exhibición pública propensa a confrontaciones de ninguna clase de españoles» haciendo alusión a la exhumación de Franco llevada a cabo el 24 de octubre de 2019. Se expone además:
«José Antonio seguirá manteniendo el sitio preeminente que le corresponde en la memoria de muchos españoles y no podrá ser objeto de más humillaciones. Como mucha gente sabe, este trasladado sería el cuarto que se produce desde su muerte y su nuevo enterramiento sería el quinto de su mal llamado eterno descanso. Pocos restos humanos han viajado tanto como lo de José Antonio. Pero conociendo sus ideas, ésta sería probablemente la última de sus preocupaciones».
Los familiares ya han elegido el nuevo lugar donde enterrarán de nuevo los restos, atendiendo así la voluntades que Primo de Rivera dejó en su testamento antes de morir. El comunicado concluye así:
«José Antonio seguirá manteniendo el sitio preeminente que le corresponde en la memoria de muchos españoles y no podrá ser objeto de más humillaciones.
Tras la publicación del comunicado, fuentes del Gobierno señalan que el Ejecutivo «agradece la predisposición de su familia para proceder a la exhumación y cumplir con la Ley de Memoria Democrática», la cual establece que, antes de la exhumación se debe contactar con la familia para poder llevar a cabo el trámite.
Además, fuentes cercanas del Ejecutivo han resaltado que el Cuerpo de Primo de Rivera «puede inhumarse en la cripta de Cuelgamuros, si así lo quisieran, ya que José Antonio Primo de Rivera es una víctima de la Guerra Civil». Se le olvidó decir que fusilado, injustamente, por representantes de la República.