El Ministerio de Sanidad autoriza que las farmacias hagan test en zonas de alta incidencia de la Comunidad Madrid pero concretará con la Consejería el protocolo técnico a seguir

El Ministerio de Sanidad autoriza que las farmacias madrileñas realicen test de antígenos, siempre que sea en zona de alta incidencia del Covid-19.
De este modo, el Gobierno de España accede a la petición trasladada por el Ejecutivo regional madrileño para poder utilizar la red de farmacias para realizar cribados masivos en poblaciones con una alta incidencia acumulada, informaron fuentes conocedoras del contenido de la reunión del Grupo Covid que ha tenido lugar ayer tarde en Madrid.
Previamente a ella, la consejería de Sanidad había mantenido durante la mañana (también de ayer) una reunión técnica con el Ministerio del ramo en la que consiguió el primer «sí», condicionado, a la realización de test en farmacias: serían para cribados en zonas de especial intensidad de la enfermedad, y previamente será necesario concretar datos en otra reunión técnica.
Por la tarde, el vicepresidente, Ignacio Aguado, se reunió con la secretaria de Estado de Sanidad, Silvia Calzón, y la directora de la agencia del Medicamento y obtuvo idéntico mensaje final: Las farmacias de Madrid podrán realizar test de antígenos en las zonas con alta incidencia.
Actualmente, todo Madrid lo es, ya que según los datos del Ministerio de Sanidad y de la consejería, su incidencia acumulada de casos a 14 días ronda los 209 por cada 100.000 habitantes. Según el baremo que estableció en su día el Ministerio de Sanidad, se consideraba incidencia alta la que se situaba entre 150 y 250 casos, junto con otros criterios como ocupación de camas y positividad en las pruebas de detección del coronavirus. Este «tope», no obstante, lo puede modificar Salud Pública si lo estima conveniente.
Por este motivo, «ambas administraciones mantendrán otra reunión técnica en los próximos días para avanzar en el protocolo para la realización de estas pruebas en farmacias en zonas con alta incidencia».
Es decir, es un «sí» condicionado: sólo para zonas de alta incidencia del virus, y tras recibir las explicaciones adicionales que se han solicitado. No se da permiso para la realización de test de forma masiva en las farmacias.