Tamara Falcó ya es marquesa de Griñón, cumpliendos por fin la última voluntad de su padre Carlos Falcó que le dejó en herencia su título más preciado

Treinta días después de solicitar el título al Gobierno, Tamara Falcó (38) ya es oficialmente marquesa de Griñón. La hija de Isabel Preysler (69) ha cumplido por fin con la última voluntad de su padre, Carlos Falcó, que le dejó en herencia su título más preciado. Es la peor noticia para Esther Doña, que en las redes sociales todavía se hace llamar «Marquesa viuda de Griñón».
La oficialidad del título llega tras un año muy convulso para Tamara, que no solo ha tenido que hacer frente a la pérdida de su progenitor. Cinco meses después murió el marido de su hermana Xandra, Jaime Carvajal, a la temprana edad de 56 años. El pasado 20 de octubre también se tuvo que despedir de su tío, Fernando Falcó, que falleció a los 81 años tras una larga lucha contra el cáncer.
Según contó la propia Tamara, tenía pensado haber solicitado el título antes, pero las restricciones impuestas por el coronavirus retrasaron el procedimiento. Con su nombramiento el título deja de ‘pertenecer’ a la viuda de su padre, quien todavía se hace llamar «Marquesa viuda de Griñón» en su biografía de Instagram.
Doña también tiene escrito otro reconocimiento: «Marquesa viuda de Castel-Moncayo», pero dicho título tampoco pertenece a ella, dado que lo heredó Manuel Falcó, el mayor de los hijos de Carlos Falcó, hace dos meses.
Tamara está orgullosa de haber recibido el título más destacado de su padre: «Gracias Papi por dejarme el legado más bonito que se le puede dejar a una hija: tu amor», escribió en Instagram hace unos meses.
Tras recibir el título oficialmente, la hermana de Enrique Iglesias seguirá haciendo de las suyas en El hormiguero, donde colabora desde septiembre, y en Cocina al punto, que presenta junto al chef Javier Peña en La 1.
Recientemente también ha sido nombrada embajadora de la Pontificia Scholas Occurrentes en España. Un importante paso que la ‘acerca’ más al Papa Francisco.