Narciso Romero es primer alcalde socialista que se opone a ceder los ahorros a Pedro Sánchez: Asegura tener comprometidos los 27 millones de euros de remanente
El alcalde de San Sebastián de los Reyes Narciso Romero es el primer socialista que se ha negado a aportar el remanente de tesorería al Estado, como ha requerido Pedro Sánchez, al considerarlo «una clara lesión a los derechos de los ciudadanos».
Según fuentes del Consistorio, gobernado en coalición por PSOE y Ciudadanos, ese remanente, cercano a los 27 millones de euros, servirá para un «completo y ambicioso» plan de inversiones.
El pasado 3 de agosto, la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) aprobó la polémica propuesta de Hacienda que permite a las entidades locales que cedan sus remanentes al Gobierno beneficiarse de 5.000 millones de los presupuestos generales hasta 2021 y ver devueltas sus cesiones de aquí a diez años.
El acuerdo, que salió adelante gracias a que el presidente de la FEMP forzó su voto de calidad, provocó las críticas de todos los partidos de la oposición. ERC, BNG, PNV, Ciudadanos o PP adelantaron que no apoyarán la tramitación del decreto. Incluso los comunes de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, se mostraron en contra del plan, que tildan de «tomadura de pelo», pese a que su socio, Podemos, forma parte del Gobierno de coalición.
Ahora, es un ayuntamiento con un alcalde del PSOE el que se rebela contra la medida al considerar que tiene la legitimidad para hacerlo ya que la cesión del superávit «era voluntaria». «Nuestro compromiso es con los vecinos, con un ambicioso plan de inversiones con una dotación de más de 95 millones de euros», señaló el alcalde, Narciso Romero, del PSOE, en su cuenta de Twitter, levantando un importante revuelo en su partido.
En ese sentido, fuentes municipales explican que el acuerdo FEMP-Hacienda «puede resultar muy beneficioso para una serie» de ayuntamientos que, por su situación contable, «puedan ver superadas algunas de las limitaciones más lesivas de la denominada Ley Montoro, que impedía movilizar fondos de superávit presupuestario, fondos que en circunstancias de pandemia y crisis social como la actual se han tornado absolutamente imprescindibles».
Para el Ayuntamiento de Sanse, sin embargo, «el contexto y las particulares circunstancias» por las que atraviesa el consistorio, «que es el fin último de nuestra acción representativa y de nuestro compromiso político municipal», conllevan a que una cesión temporal de dicho remanente «supondría una clara lesión a los intereses de nuestros ciudadanos».
Fuentes de este Consistorio subrayaron ayer a este medio que su razón para evitar ceder el superávit es la puesta en marcha de un plan plurianual de inversiones que, después de cuatro años de presupuestos prorrogados, «representa una oportunidad imprescindible para adaptar nuestra ciudad a las necesidades de nuestros vecinos, con una importante flexibilidad para las futuras contingencias que puedan aparecer como consecuencia de las actuales circunstancias adversas».
«Estas inversiones suponen, por tanto, un importante plan de contingencia para el presente y el futuro de la ciudad y de ahí nuestra insistencia en emplear todos los fondos en el Ayuntamiento para las necesidades que puedan surgir por parte de nuestros vecinos», concluye un portavoz municipal.