Vox pone tres condiciones a Ayuso para aprobar sus presupuestos de 2020: Reducir el gasto político ineficaz, eliminar las subvenciones ideológicas y una gran bajada de impuestos

El Gobierno de la Comunidad de Madrid, una coalición entre PP y Cs, precisa necesariamente de Vox para poder sacar adelante los presupuestos del año que viene. Y el partido de derecha radical le ha puesto este jueves tres condiciones a la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, para «empezar a negociar» su apoyo a las nuevas cuentas regionales de 2020.
Las demandas del partido de Rocío Monasterio pasan por una «reducción del gasto político ineficaz», la «eliminación de subvenciones ideológicas» y una «ambiciosa bajada de impuestos». Su portavoz ha advertido que «sería un error» no llegar a un acuerdo.
Vox ha desplegado su lista de requisitos en el Pleno de la Asamblea de Madrid en una semana en la que se ha sabido que su grupo parlamentario ha presentado una enmienda a la totalidad del proyecto de ley elaborado por el Ejecutivo autonómico para aumentar las desgravaciones en tres tramos del IRPF. Esta oposición contrasta con una de las exigencias que la formación mantuvo para facilitar la investidura de Ayuso, la de «eliminar o rebajar» todos los tributos regionales.
En su turno de palabra, la presidenta madrileña sólo se ha comprometido explícitamente a cumplir con una de las tres condiciones, la de la reducción fiscal. «Este Gobierno, a pesar de las dificultades, va a bajar los impuestos en cuanto tenga esa posibilidad», ha reiterado.
Ayuso, además, se ha mostrado molesta con el rechazo de Vox a su propuesta inicial de aumentar las bonificaciones en el IRPF a tres colectivos concretos a partir de 2020. En concreto, ha propuesto un alivio tributario para quienes cuidan de sus familiares, los que solicitan un préstamo para estudiar y los jóvenes que compran viviendas que permitiría ahorrar 16,4 millones de euros a unos 30.000 ciudadanos.
«Ustedes se han opuesto a esas deducciones, junto con la izquierda, en un momento que nos parece francamente inoportuno, porque no las hemos anunciado esta semana, llevamos meses haciéndolo, ustedes no han dicho nada, y según se acerca el momento de los presupuestos lo hemos mezclado todo y yo a veces sospecho que las broncas, las diferencias que mantienen nuestros partidos en otras comunidades, ayuntamientos y el Congreso de los Diputados, lo acabamos pagando en este Parlamento cuando nada tiene que ver», se ha lamentado Ayuso.
Vox, por su parte, ha señalado que en Andalucía, donde existe el mismo Gobierno bicolor apoyado por su partido, el bloque del centroderecha ha logrado un acuerdo para aprobar unas nuevas cuentas que en Madrid aún ni se ha empezado a negociar formalmente. A lo que Monasterio ha apostillado: «¿Cuál es el problema? ¿Es quizá el señor [Ignacio] Aguado [de Cs], que está ahí sentado gracias a los votantes de Vox a los que insulta y desprecia diariamente?».