Crece la inseguridad ciudadana en Pozuelo a gran velocidad y los vecinos empiezan a tener miedo. El grave problema está en que el Gobierno no sabe cómo atajarlo y solo vende humo

No hay día que a la redacción de El Correo de Pozuelo no llegue alguna noticia relacionada con la vulneración de la seguridad ciudadana, aquella seguridad ciudadana de la que esta villa se sentía orgullosa. Ya no.
Y son cosas graves. Cuando no es un robo es un hurto, un allanamiento de morada o un asalto con robo a un chalet. El último, de sábado pasado, en Somosaguas. Unos malhechores tuvieron retenidos a dos ancianos durante 3 horas. Y se llevaron todo lo que quisieron.
Lo de La Cabaña ya parece cachondeo. Hace unos días, tres encapuchados intentaron entrar en casa con la familia dentro mientras cenaba. Aquel querido barrio terminará siendo La Colonia Ideal del Robo.
Y no hablo de La Colonia de los Ángeles o de la propia Avenida de Europa o de las grandes urbanizaciones o de tantas otras zonas de Pozuelo porque es de traca. El gran Pozuelo de Alarcón se ha convertido en el paraíso de los ladrones.
Y la alcaldesa lo sabe. Y la Policía lo sabe. Las dos policías lo saben. Pero no son capaces de solucionar un problema capital para Pozuelo…
Dice la publicidad gubernamental que el Ayuntamiento prevé instalar 17 cámaras para la vigilancia del tráfico. Su ubicación exacta se ha decidido por un grupo de trabajo mixto entre la Policía Nacional y la Policía Municipal para garantizar “una colocación estratégica”.
Dice también que van a invertir 300.000 euros y que el proyecto se ejecutará a lo largo de 2019.
Pero a los delincuentes se la refanfinfla. Valiente chorrada.
Dicen que para apoyar esta milonga “Se ha elegido este sistema porque Pozuelo se encuentra enclavado entre grandes vías de circulación. Se permite la lectura de los vehículos que circulen tanto de día como de noche. También se detectarán coches en ambos sentidos de circulación y se leerán las matrículas hasta una velocidad de 200 kilómetros por hora”.
Vamos que nos vamos. A veces uno llega a pensar que la policía no es tonta pero que nos toma por tontos.
Dice también la publicidad gubernamental que Pozuelo de Alarcón ya tiene preparado un dispositivo especial de seguridad para estas navidades y que va a ser la pera limonera.
Este dispositivo especial, que se realizará con una estrecha colaboración entre la Policía Municipal y la Nacional de la ciudad, intensificará la vigilancia en zonas comerciales, mercados navideños, zonas de confluencia infantil y juvenil y zonas de ocio.
Como sea como el dispositivo de las fiestas de septiembre puede ser glorioso. Se llegaron a hurtar más 70 teléfonos móviles en un solo día.
En susodicha reunión estuvieron presentes (para su vergüenza), además de la alcaldesa, el concejal de Seguridad Gerardo Sampedro; la jefe de Policía Municipal Sonia Rodríguez, la inspectora jefe de Seguridad Ciudadana-jefa accidental de Policía Nacional Laura Delgado; el inspector jefe de Policía Judicial de Policía Nacional de Pozuelo Alberto Dacruz; el representante de la Dirección General de Seguridad de la Comunidad de Madrid Javier Hernández y el representante de la Delegación de Gobierno Juan J. Ozamiz, entre otros. Todo un elenco de personalidades.
Y la alcaldesa, en su línea, recordó después que Pozuelo sigue siendo una de las ciudades más seguras de España. Esta mujer terminará teniendo más cara que espaldas.
¿No sería más fácil poner a trabajar a la policía municipal, por ejemplo? Pero a trabajar de verdad. En la calle. Donde se les vea…
Fue lo que hizo el alcalde Martín Crespo, en momentos más difíciles que estos, y con él llegó la seguridad ciudadana que hemos disfrutado durante tantos años…
Este Gobierno solo sabe vender humo.
Seguiremos informando…
La Piraña del Meaques