Dos podemitas insultan gravemente a Paloma Adrados y ni el PP de Pozuelo, ni su Gobierno, ni sus miembros (salvo dos excepciones) y ni siquiera la alcaldesa Quislant lo condenan

La manifestación de las fiestas del World Pride, esas que iban a ser la caña de España y luego resultó que solo fueron un poco más que nuestro tradicional Orgullo Gay, y a la que asistieron todos los políticos, iba encabezada, entre otros por Pablo Iglesias y Lorena Ruiz Huertas (para quien no lo sepa Lorena es la portavoz de Podemos en la Asamblea de Madrid.
Hasta aquí normal. La izquierda en España (y más la izquierda radical) siempre está a la vanguardia de todo este tipo de manifestaciones relacionadas con la nueva ideología de género que pregonan. Y a mí me parece muy bien. Partidario como soy de la libertad, me parece bien todo lo que lleve consigo el concepto.
Pero esta pareja, defensora a ultranza de la ideología de género y mientras hablaban de sus ostentosas derrotas en sus respectivas mociones de censura, insultaron gravemente a Paloma Adrados. La insultaron. En Pablo es algo habitual. Ya quiso azotar a Mariló Montero. Pero me extrañó en el caso de Lorena, tan fina y tan bien educada y de tan buena familia como es ella. Pero supongo que no es fácil evitar la incoherencia de la izquierda. Cuesta. Hay poca gente de izquierda que no caiga en ella.
Pero a lo que iba. Esos insultos fueron recogidos por unos micrófonos abiertos (una manifestación es un hecho público y todos los medios, es orden ancestral, tienen que llevar los micros abiertos. Al menos, antes). Y como OKDiario los llevaba abiertos, pillaron la conversación de ambas personalidades insultado a Paloma Adrados, la Presidenta de la Asamblea de Madrid. La segunda autoridad de la Comunidad de Madrid.
¿Y qué ha pasado tras conocerse los insultos?
Nada. ¿Qué va a pasar? Los insultos venían de donde venían y cuando vienen de ese lado no pasa nada. Eso es normal. Siempre fue así y siempre lo será. Unos porque no lo consideran insulto y otros por no señalarse. Pase de mí este cáliz.
Pero a mí lo que me llama la atención es que tampoco haya sucedido nada en Pozuelo. Mientras, como es lógico, el PP Nacional y el Regional han criticado duramente los insultos, en el PP de Pozuelo de Alarcón nadie ha dicho lo más mínimo. Fue alcaldesa de Pozuelo hace dos años y sigue siendo la presidenta de la Agrupación pepera de esta villa. Pero ni el PP, ni el dicharachero Grupo Popular, ni el Gobierno de Pozuelo, que lo formó Paloma curiosamente, no ha dicho nada. Adrados montó la lista electoral que actualmente Gobierna y la alcaldesa Quislant le debe sus quince minutos de gloria pero nada.
Lo de la Olvidable, que yo cuento en mis columnas, va a ser verdad. Estos se lo han creído y han obrado en consecuencia.
Concejales, que lo son por la gracia de Paloma Adrados como fueron todos los que venían de la legislatura de Sepúlveda y que la actual Presidenta de la Asamblea salvó por la campana, la han olvidado. Ay, Almudena, con lo que te gusta a ti condenar a los machistas. Solo retuiteó sobre el tema Mónica García Molina. Retuitear. Solo uno. No condenó personalmente.
Concejales que vinieron con ella, de su total confianza en la legislatura anterior, también la han olvidado.
De los dos forasteros que vinieron, solo lo hizo Paloma Tejero. Un par de retuit. Ninguna condena personal. Pero algo es algo. Eduardo Oria, al que también recogió Adrados en Pozuelo, se olvidó de ella.
Y para qué hablar de Susana Pérez Quislant. Susana vino a Pozuelo de número 11 de su lista, nunca había sido nada ni nadie, venía de relleno, y en cuatro años (uno de ellos ausente por enfermedad) Adrados la hizo alcaldesa. Bueno, pues a Quislant también se ha olvidado de condenar los insultos que le infirieron y ni siquiera la apoyó públicamente con un simple tuit.
De desagradecidos está el mundo lleno. Gran verdad.
Así es la política de tercera regional que estamos viviendo en Pozuelo. Esto es un hecho más que dice mucho de la categoría política de este Gobierno y este PP que se lo debe todo. Y del que, además, como dije más arriba, Adrados sigue siendo la Presidenta del partido en Pozuelo.
Y me permito censurar estas lamentables conductas porque una cosa es una cosa y otra cosa es un paraguas.
Yo no me llevé bien con Paloma Adrados. Mejor dicho, me llevé bien hasta que la critiqué. Suele pasar. En ese momento, dejé de llevarme. Luego se fue y le di buena leña. Pero aquello, precisamente, me da más razones para ahora condenar los insultos podemitas. Por aquello estoy ahora en condiciones de escribir esto y lamentar un acto tan machista.
Y es que yo, aunque la haya criticado mucho políticamente hablando y, posiblemente, la siga criticando, la respeto como mujer. Sobre todo como mujer.
Y, además, soy coherente.
El Capitán Possuelo