Sra. Pérez Quislant, solo quiero/queremos vivir como Vd… tranquilo/s el fin de semana y una malsana discoteca nos lo impide

Hace un tiempo, el hoy penado -por la ubicación a la que lo han trasladado – exconcejal de UPyD y recuperado al servicio de la ciudadanía municipal, por mor de sus conocimientos y oposición, tuvo la primera oportunidad de comprobar lo que él denominó: mala vida, que le daban a la familia del que suscribe y a todos los vecinos colindantes como consecuencia de que alguien, nadie sabe muy bien por qué, autorizó la legalización de un antro-local-subterráneo, hoy dedicado a funciones musicales nocturnas, aunque la iluminación exterior asemeje a otro tipo de locales dedicados a otros menesteres, próximos a otro tipo de diversión, más íntima, que por cierto, en algún tiempo y en las proximidades también se desarrollaba; eso sí, fruto de que la música despertaba ese tipo de pasiones.
Mientras, los moradores de la zona afectada y a la fuerza, fruto de obligarnos a despertar por los propietarios y los consumidores del local, teníamos que oír en ese tono “melifluo y susurrante“ que Vds., amigos lectores, saben se utiliza en las madrugadas acompañadas del alcohol y otros estimulantes. Expresiones que, habitualmente, aligeran el carácter y convierten la conversación en un altavoz estridente y lleno alaridos. ¡Bendito idioma español, tan rico y exuberante para todo!
Decía que Tono, fue el primero que sufrió en vivo y en directo la situación de los no-ciudadanos contiguos a la Disco que más, posiblemente, cambia de nombre, al menos en Pozuelo. Se sorprendía de lo que nos tocaba vivir y del abandono por parte del Ayto. ante tal situación. Digo bien abandono, porque tras decenas de denuncias, seguimos como al principio: cambian de nombre, no sé si de propietario, las sonometrías que se realizan superan los límites legales, aparentemente, van a solucionar los problemas…y, nuevamente, esta madrugada del sábado: ruido atronador, llamada a la Policía Municipal y…vuelta a empezar.
Me congratula saber que hay un Concejal de cascos…; he tenido la oportunidad de reunirme con la Concejal de Urbanismo, fruto, dijo, de su interés por resolver la situación y reconozco, que visto lo de Somosaguas y el MCDonald’s quise tener fe, pero un vecino sufridor, me lo advirtió: no valdrá para nada – razón que tenías, sufrido Osuna-. Desde Mayo, estamos pendientes de las actuaciones que sé, por las mediciones que hicieron, superaban lo permitido: ellos siguen y nosotros a sufrir (me refiero a los políticos, a los funcionarios y a los del antro-local-subterráneo). Luego recordé a Tono y su artículo del cocido, los Poetas y las amistades peligrosas y, también me vino a la mente que una cosa es Somosaguas y otra el casco de la Estación.
Y seguí recordando que todo pudo haber tenido un final feliz con la actual alcaldesa… por accidente, ella fue la primera que, ante nuestras denuncias, se puso en contacto y cuando no le convino, utilizó a una funcionaria para que me dijese que no la volviese a llamar (mis comunicaciones con ella solo fueron por Whatsapp) quedaste definida…como persona, políticamente luces tanto con paella como con caldereta; no tenía ni tiempo, ni soluciones Vd. Sra. Quislant que se ha ido a vivir próxima – según dicen – al famoso restaurante del cocido – el de los Poetas -, es quien tiene que dar solución, una posible es llevándose la música cercana a su nueva vivienda y que compartan con Vd., que ya lo sufrió, y sus nuevos vecinos las “bondades” de los locales musicales con insonorización imposible, pero, al igual que los que solo pasan por la Universidad : Ni aprenden, ni aprovechan la experiencia.
Tampoco olvido que el Sr. Sampedro, en reunión multitudinaria ¿la recuerda? Nos demostró con satisfacción que conocía con exactitud el número de ciudadanos Useños que vivían en el Municipio, desconociendo que uno de ellos nos acompañaba. Por eso, querido Gerardo, entendí también que le dedicaseis una calle al citado país. Allí no duermen pensando en lo que pueda pasar en Pozuelo de Alarcón. ¿Cómo van a tener tiempo para dedicarle a los vecinos, si América los llama?
Como pueden ver, queridos conciudadanos, llevamos muchos años con tan triste realidad y solo hay algo inmutable: El PP y dado que a pesar de todas nuestra razones y demostraciones y a pesar de cómo se toman las leyes y normas de convivencia los que todos los fines de semana se empeñan en impedir nuestro necesario descanso, es el partido azul el único que no encuentra solución con los argumentos que, constantemente, planteamos con un único objetivo: queremos seguir viviendo en nuestra casa, también, los fines de semana.
Hoy tras larga reflexión creo haber encontrado la solución: levántense el lunes Señores del Gobierno Municipal y ubíquennos en La Finca, o en Monte Alina, si quieren más próximos en Somosaguas, incluso en la Avda de Europa o en una calle menos conocida como Lope de Vega, recuperen toda la documentación que disponen sobre Húmera, 8 y díganme si no serían capaces de ver la luz y aplicando la ley retirarnos este suplicio.
No lo harán y solo vds. sabrán el porqué, nosotros no cejaremos en nuestros derechos que espero podamos recuperar, aunque para ello, seguramente, tengamos que ver otro nuevo color en nuestro Ayuntamiento – de los pozueleros -.
Mientras, seguiré caminando, que en esta ocasión no es más que defender los derechos que me asisten como residente y que Vds. me/nos impiden disfrutar: El derecho al descanso.
A. Nogueiro
Lo de siempre con esta gente. Solo les preocupan un tipo de vecinos. Los suyos. Y los suyos no tienen ni bares ni discotecas debajo.
Se nota demasiado lo que les importa. Y se nota de demasiado que no son de aquí, ni se les espera.
Está claro que Pozuelo necesita otros colores.
Muchas gracias por su colaboración. Saludos