Botellines y vídeos: Compuestos electorales

Con el pistoletazo de salida para el día 26 de Junio, solo nos queda recordarles a las madres despistadas que se inicia el besuqueo de bebés y peques menudos por parte de todo político que se precie de hacerse ver con el pueblo, al que tanto quiere y tanto debe y, al que nunca recuerda una vez electo.
A los abuelos callejeros, tino y cuidado, cualesquiera de los candidatos se les aproximarán en el bar o en el Mercado y con la disculpa de las pensiones… ¡uy!… manoseo sobre el hombro, promesas para los nietos en paro -los hijos ya son insalvables- y el recuerdo del voto útil. A todos nuestros patriarcas, les recuerdo: cuidado con ellos, que les llevarán hasta el bastón, si tienen a bien prestárselo.
Para los jóvenes, poca cosa, salvo que para prever el futuro hay que conocer muy bien el pasado. Desde todas las opciones les prometerán tiempos de bonanza y felicidad. Los mismos que ellos han podido comprobar que solo con trabajo, esfuerzo y preparación podrán alcanzar, más allá de quién nos llegue; aunque, frente a la rebeldía de la edad, siempre es bueno recordar, lo de predicar y dar trigo y ejemplos tienen en todas las confluencias actuales.
A los que aún no pueden volver al trabajo, por incomparecencia del mismo desde la noche de los tiempos, además del consuelo obligado de todos los que a su alrededor estamos, la necesidad de que escuchen, con atención, porque sus males se acabarán y tras el día electoral retornaran a ser de nuevo ciudadanos con derechos y deberes, nómina y pagas, ocupación y futuro… Es tal la desvergüenza de lo que nos dicen que ni para ellos son capaces de bajar la cabeza.
Habrá oportunidades para todos: para los refugiados, para las personas sin hogar, para los okupas sin hipoteca, para los desertores de la moral, para los que quieran ser y no ser, estar y marcharse…, para todos hay un tiempo y un momento en las promesas que ya se acercan en cada mirada que las noticias nos traen… un tiempo nuevo. Más o menos igual que el anterior y el otro y el de antes de…
Reconozcamos una cosa, en esta ocasión las fiestas serán más baratas y los espacios audiovisuales más llevaderos. Nos lo acaban de mostrar desde el partido que no es capaz de dialogar con nadie y desde los defensores de los ritmos caribeños.
La culpa la tienen dos botellines y un video monclovita. Por primera vez, el verano anuncia su bebida por excelencia, también, para las elecciones; como símbolo de reconciliación de las izquierdas que siempre fueron y se vuelven a juntar. Enfrente, el partido “ en funciones “ aprovecha el faro monclovita para llamar a la concordia y al voto útil. Precisamente ahora, cuando todos somos conscientes de su inexistencia.
Mientras, en nuestro entorno Pozuelero, no lo duden, nuestros gobernantes retornarán a la calle, que no conocen y querrán aproximarse a los problemas, que no podrán resolver para, finalmente, como en todas las películas Useñas ver en la pantalla el The End que significa, en versión municipal, seguir como siempre, por cierto otra película más.
A los ciudadanos, solo nos queda aprovechar el aire que empuja y procurar la buena dirección, tratando así de llegar al mejor puerto; buscando el cobijo necesario que nos llene de esperanza e ilusión para las tormentas que se avecinan en los días venideros.
Al menos, esperemos, que Eolo nos proteja y nos permita seguir caminando.
A. Nogueiro