No me llevo bien con la alcaldesa Quislant. No me llevo. Y mira que lo intento. Debe ser cuestión de piel

Qué días más divertidos hemos pasado Luis y yo con los niños y Tobby. A veces un descanso no viene mal. He recargado pilas. He vuelto con las ideas claras. He decidido lanzarme al nuevo negocio y franquiciaré. Sí. Lo hemos decidido los dos. Me preocupa la situación política nacional, pero no podía esperar. Tenía que decir sí o no. Y fue, sí.
Así que, amigos. Voy a ser empresaria. Estoy feliz. Aunque también estoy preocupada por lo que me espera y el poco tiempo libre que me quedará. Me dijo Manolo que a ver si ahora empezaba a cometer errores y me pillaba la Alcaldesa accidental. Y entonces decidí que mi primera notita de vuelta se la iba a dedicar a ella. Toda a ella.
Querida Alcaldesa (accidental):
Después de nuestra última conversación, a raíz del cheque bebé socialista y que usted va a “regalar” con mi dinero y que yo critiqué, me dicen que sigue con la misma historia. Encontrarme. Y así llevamos ya un año. Usted no cambia ni aunque Esperanza Aguirre le haya regalado la Alcaldía más codiciada de la Comunidad de Madrid. ¡Y sin mi voto, aunque votara al PP! No la voté a usted. Voté a la YA OLVIDADA, a pesar de todo. A usted jamás. Usted era un daño colateral que asumí. Como asumí otros. Espero que nunca más vuelva a ocurrir algo así.
Usted dice que no me lee. Usted dice que no lee a ninguno de mis compañeros de este diario digital. Pero les critica. Usted dice que no entra en El Correo de Pozuelo. Usted prohíbe que nos convoquen o nos manden notas de prensa. Es un poco cínica, ¿no cree? Su portavoz y primer teniente de Alcalde dice entre líneas, con su consentimiento, que los contenidos de este diario son ofensivos, de dudosa veracidad o nulo contraste. También dice que escribimos con nombre falsos o seudónimos… Que lo diga usted, ¡es de risa! Luis diría que es un saco de verdades, porque no suelta ni una.
Usted nos lee. Nos lee bastante. Cada mañana. Aunque le tiemble el pulso cuando entra en este medio digital. Entra. Luego, la llamada de histeria. ¿Me equivoco? A veces manda a alguien a negar cosas. Otras da órdenes para que nadie escriba y la defienda. ¡Madre mía! Qué ridículo. Si sólo la defienden los estómagos agradecidos, no se equivoque. Luego llega el cabreo matinal. No. No nos controla y eso le come por dentro. Usted debe pensar que con lo que le cuesta ser tan falsa, cómo es posible que un medio local no haya comprado su falsedad. Y eso le revienta. Y, al estilo PODEMOS, busca culpables.
Y ahí aparezco yo. Sira Q, CULPABLE. Hay que ir a por ella. Yo, porque sabe qué opino sobre usted. Yo, porque digo lo que pienso sobre usted. Yo, porque no la he perdonado todo el daño que ha hecho a tantas personas y a mi pueblo. Yo. CULPABLE de no aceptar una imposición de Génova y de Esperanza Aguirre. Yo CULPABLE porque no la creo y no la quiero. Yo, porque con la devolución de un martes por la tarde no me vendo y por un sueldo extra, menos.
Pero no soy la única. Otros opinan como Yo, querida Susana Pérez. Sí. Otros colaboradores de este diario digital también opinan como yo. Cada uno tenemos nuestros argumentos. Por eso a usted no le gustamos. Porque decimos lo que pensamos. No quiere que pensemos ni que escribamos, ni que la critiquemos. Tampoco que recordemos sus “andanzas” anteriores y su forzada y falsa sonrisa actual. Usted no quiere que digamos nada de usted.
Si hablamos de usted, porque lo hacemos. Si criticamos su gestión, porque la tenemos manía. Si valoramos sus decisiones políticas, porque vamos a por usted. En fin. Ni usted misma es capaz de admitir que, por desgracia para todos, usted es la Alcaldesa de Pozuelo de Alarcón. Accidental. Si. Pero Alcaldesa al fin y al cabo. Y que usted está en el punto de mira. Y, además, usted no llegó a ese puesto de manera normal. ¿A caso fue usted la candidata del PP a la Alcaldía?
Susana. No llore más a la gente, por favor. No cuente más cuentos. Está haciendo un papel de víctima frente a tantas personas que me sorprende. Porque solo los que la escuchan y se callan, saben la inmensidad de su falsedad. Me decía Manolo que usted se cree este nuevo papel. Y eso da miedo. Se lo cree. Igual que cuando era la mala que faltaba el respeto a los funcionarios de la Casa. Igual que cuando era la mano derecha de la YA OLVIDADA y, al mismo tiempo, la traidora de la YA OLVIDADA.
Querida Alcaldesa (accidental). Yo no la quiero. Y usted lo sabe. No la quise como número dos del PP de Pozuelo. Y lo escribí. Y no la quise como Alcaldesa. Y lo he escrito. Pero no esté obsesionada conmigo. De verdad. Yo no soy ninguna enemiga. Créame. Lo nuestro es cuestión de piel.
Dice un refrán muy sabio que a todo el que escupe al cielo le cae en la cara. Pues eso. Cuídese vaya que le estén haciendo lo mismo que usted hizo a la YA OLVIDADA. Cuídese de todos y todas. Es un consejo. De costurera y madre. Pero no siga obsesionada conmigo. Libérese y acepte la crítica. Y libere así también a los demás.
Sé que, a pesar de mis palabras, va a continuar con su obsesión. Así que seguiremos unidas. Ahora sé que como ya le han quitado todos los carguitos del PP de Madrid, estará más tiempo en mi pueblo. Y ahora quiere ser la presidenta del PP de Pozuelo. Ya se oyen rumores… Se avecina una gran tormenta. Y yo seguiré aquí. Pero siga, siga… Ya se lo dije hace casi un año. “Estuvieron muy cerca…..” .
Ya ve, yo sigo aquí. Un año después. Y yo seguiré. Lea bien. Yo seguiré. Y, ¿usted?
Anímese a escuchar otra vez esta simpática canción. Si no es capaz de encontrarme . Al menos, diviértase.
Sira Q.