El Gobierno de Pozuelo no tiene voluntad política ni ganas de tenerla para solucionar los problemas complicados de los vecinos que le pagan su sueldo

A veces pienso que la política del Gobierno de Pozuelo es tan vieja como el mundo. Se trata de aguantar. El que aguanta, gana. Su lema es ya escampará. Y siempre escampa. Oye, que sí. Tomo nota, pero, luego, si te he visto no me acuerdo. Su voluntad por resolver problemas medianamente complicados es manifiestamente mejorable. Te lo resuelvo si es facilito. Como sea difícil, va a ser que no… En fin y, ya si eso, hablamos…
Y hay muchos ejemplos que lo corrobora esta indolencia. Me estoy acordando ahora de la UNED, por ejemplo. De cómo la Universidad a Distancia se fue de Pozuelo porque el Gobierno fue incapaz de encontrar una solución al problema aunque dijese que se habían matado a trabajar. Extraño concepto del trabajo tienen estos políticos.
Y también hablo, por poner otro ejemplo, del problema que tienen los vecinos de la discoteca Arena Privilege, que es como se llama en este momento, pero que, como cambia tanto de nombre, es conocida por la discoteca de la Carretera de Húmera, 8.
(Para los concejales que no hayan pasado nunca por esa calle, decirles que es calle muy importante ya que une la Estación de Renfe con la Avenida de Europa y termina, lógicamente en Húmera)
Y hablo de estos ejemplos porque ambos han sucedido en estos primeros 200 días de Gobierno Quislant.
Al final, la UNED se perdió como yo perdí a mis abuelos y el caso de la discoteca está más abandonado que unos zapatos viejos, que diría Sabina. Bueno, que diría Joaquín Sabina y el concejal Gerardo Sampedro en el Pleno de Noviembre.
Para el concejal de Seguridad, esa discoteca lleva dando problemas desde hace mucho tiempo a sus vecinos y la policía municipal ya ha ido muchas veces a comprobar el tema y no hay solución. Media verdad. La policía no ha ido todas las veces que debería porque el problema sigue ahí. De hecho, cuando algún vecino les pide ayuda, la pregunta que le hacen es: ¿Se trata de ruido o de pelea?, como diciendo ya están aquí los ‘pesaos’ de todos los fines de semana.
Como no se trata de criminalizar al propietario actual (a lo largo de su historia ha tenido varios dueños) ya que él tiene los papeles en regla y no hay razón para pensar que no sea así, y los vecinos siguen protestando, el Gobierno de Pozuelo debería de llamarse andana. Ya vale de mala suerte. Aguanten, cristianamente, porque no hay otra solución. Ya vale de que el concejal de Seguridad de Pozuelo haga de Diego Godín, despejando balones.
Porque lo cierto es que el problema de un montón de vecinos sigue ahí enconado sin que nadie se esfuerce en buscar soluciones. Bueno, la oposición si lo ha intentado buscar pero, como para el Gobierno es un problema irresoluto, ‘como sé que te gusta el arroz con leche por debajo de la puerta te meto un ladrillo.
No voy a entrar, aunque debería, en cómo se le resolvió el problema de caso McDonals a unos vecinos de Somosaguas Centro a los que no les gustaba el olor de la comida rápida porque son ricos y votan PP y cómo a estos otros vecinos no se les va a resolver su problema de ruido porque son del barrio de la Estación, son pobres y votan a otros partidos, porque me parecería un argumento muy simple. Creo, sencillamente, que todo se debe a que, en este caso, no hay voluntad política de resolverlo. O, si hay voluntad política, no hay ganas de trabajar. Y si hay ganas de trabajar no hay imaginación. En Pozuelo puede pasar de todo.
Y se vio esa falta de voluntad política en el Pleno de Noviembre, aquel maratónico Pleno de los Presupuestos. Y se vio como la pregunta para respuesta oral que hizo C’s sobre el tema fue despreciada por la presidencia del Pleno y por el propio concejal Sampedro porque ya llevaban muchas horas allí reunidos. Un gesto de desprecio impropio a unos vecinos que sí llevan muchas horas soportando ruidos. A la alcaldesa Quislant se le olvidó dar paso al señor Berzal en la duplica y, en la réplica, el señor Sampedro usó 12 segundos para hacerla. Los justos para decir que agradecía el ofrecimiento de colaboración que le había hecho el portavoz de Ciudadanos. Inasumible en políticos que se pasan el día diciendo que están al servicio de los pozueleros.
Han pasado dos meses de aquel bochorno. ¿Qué se ha hecho? Nada. Ya escampará. Problema a resolver con el tiempo. Aguantar cristianamente.
Pero eso, señores, es de mal gobierno. Como de mal gobierno fue dejar irse a la UNED.
No digo que este problema del ruido sea de fácil solución. Pero, insisto, en que no hay voluntad política de solucionarlo.
El problema no está dentro de la discoteca. El problema está fuera. Las broncas y las voces están fuera. Y ese es un problema policial. Puro orden público.
¿Por qué no hay, por ejemplo, una patrulla policial cerca de la puerta de la discoteca esas pocas noches que abre la discoteca?
Con un coche de policía en la puerta, se acabaría el problema. Ah, que eso no puede ser…
¿Y por qué no puede ser? ¿Para qué está la Policía Municipal? Cobran de los impuestos que pagan esos vecinos, no debe olvidársele a nadie… Y esto, como mucho, sería un problema de horas extras… Pero para eso hay 18 millones de superávit.
Si la discoteca tiene todos sus papeles en regla y tiene su nivel de ruido de acuerdo a la ley, no hay nada qué decir. Pero si con las broncas de la calle. Esas sí son evitables. Y menudas broncas se montan. (Varias veces hemos publicado videos demostrativos)
Siempre se ha dicho que la policía es más preventiva que represiva, prevénganse este problema. Es fácil. Hagan algo, venga.
Aunque me temo que eso será como pedir peras al olmo.
El Capitán Possuelo
Soy Francisco Osuna, vecino de la Carretera de Húmera, nº 10 y afectado por la discoteca de la Ctra. de Húmera, 8.
Quiero hacer una puntualización MUY IMPORTANTE: No sé si la discoteca tiene los papeles en regla o no, pero lo que sí les puedo asegurar es que NO CUMPLE LA LEY. ¿Por qué? Pues porque aunque el nivel de ruido que llega a mi domicilio no supera los límites de la ordenanza (por los pelos), es un sonido AUDIBLE y CONTÍNUO desde las 12:00 hasta las 6:00 de la mañana. Y es un sonido AUDIBLE que está creado para mantener la vigilia e incitar al baile y al movimiento. Por lo tanto, mi familia y yo escuchamos todos los fines de semana música de discoteca de forma continua en horario nocturno y de descanso, lo que nos impide dormir dos días a la semana (y si hay un puente, más). Sirva como ejemplo que si con los mismos niveles de ruido, en vez de música de discoteca escucháramos música relajante de la que se utiliza en sesiones de relajación, dormiríamos como unos angelitos.
Así que esta discoteca NO CUMPLE LA LEY, y el Ayuntamiento TAMPOCO, porque ANTEPONE el derecho al ocio, al DERECHO A LA SALUD de las personas. Y resulta que las organizaciones sanitarias -como la Organización Mundial de la Salud-; nuestra legislación, así como la de la Unión Europea; y múltiples sentencias en el ámbito jurisdiccional, reconocen de forma clara y contundente que EL DERECHO A LA SALUD (y el descanso es necesario para la salud), ESTÁ POR ENCIMA DE OTROS DERECHOS.
Por eso mi familia y yo, cuando oímos al PP decir que «la ley es para todos», nos da la risa. Al menos para el Ayuntamiento de Pozuelo y el Partido Popular, NO, ya que permite que el derecho al ocio esté por encima del derecho a la salud de mi familia y mía.
Por supuesto, y para que se enteren los del PP, efectivamente, NO SOMOS VOTANTES DEL PP. ¡Faltaría más! Y estamos seguro de que por eso mismo, y por otras cosas más, nuestro problema LE IMPORTA UN PIMIENTO al Ayuntamiento.
Fdo. Francisco Osuna Osuna (vecino de la Ctra. de Húmera, nº 10)
Muchas gracias por su colaboración. Saludos