La campaña “Conoce a tus comerciantes” del Centro de Pozuelo está mal planteada, es una medida parche, injusta, discriminatoria y antigua y no servirá para nada
Ya está en marcha la campaña ‘Conoce a tus comerciantes’ que el Gobierno de Pozuelo prometió en el Pleno de septiembre para ayudar al pequeño comercio de la ciudad, fundamentalmente del Centro y de la Estación, según he leído en la Revista Vive Pozuelo de noviembre. Es loable que solo se haya tardado poco más de un mes en llevarla a cabo. Albricias.
Como ya saben los lectores habituales de esta columna, a mí esta medida, cuando se aprobó me pareció impropia de una sociedad moderna, y creo que es el momento de que me explique más detalladamente. Todo el mundo está sacando pecho y yo creo que está mal planteada, es una medida parche, injusta, discriminatoria y antigua y no servirá para nada.
Y lo es por una serie de motivos.
El primero por ser, como digo, una medida parche. Y las medidas parches son siempre provisionales. Pan para hoy y hambre para mañana. Con esta serie de medidas que se están tomando por el Gobierno del Ayuntamiento no se va a conseguir que vaya más gente de la que va a comprar a esos comercios habitualmente. Y esto es así aunque se den facilidades para que los compradores puedan aparcar cerca de los comercios, se mejore la señalización o la iluminación de la zona, se potencie la decoración de las respectivas plazas, se fomenten las actividades para atraer público, se editen planos de la zona o se hagan carteles con las fotos de los comerciantes, que sólo servirá para que cada uno de ellos se mire el ombligo, tenga su pequeño tiempo de gloria y su ego se sienta satisfecho.
El problema de las tiendas y comercios del los centros del pueblo o de la estación, y lo he dicho muchas veces, es un problema de concepto. Hay que crear la necesidad de que los vecinos de cualquier zona de Pozuelo vaya a ellos y, de paso, compre. No va a ir a ellos a comprar. No. No nos engañemos. Y no va a ir cuando las grandes y medianas superficies salpican toda la ciudad.
Y la única forma de crear esa necesidad de que los vecinos vayan al centro, especialmente, al centro de Pozuelo es convertirlo en ‘casco viejo’, como el que tienen todas las grandes ciudades, aprovechando ese magnífico acuerdo al que han llegado el Gobierno y el PSOE.
Es cierto que los barrios de los centros de Pozuelo y la Estación necesitan una rehabilitación. Hay casas y rincones muy exigidos de arreglos de todo tipo. Y está muy bien que se lleven a cabo. Pero cómo solamente se quede en eso, no se habrá avanzado nada en ese otro problema que necesita resolver el pequeño comercio.
No sé en qué momento del desarrollo del acuerdo Gobierno-PSOE se estará en este momento. No sé si se habrá creado ya una comisión de estudio. Como nunca se dice nada en esta ciudad, cualquiera sabe. Espero que, al menos, nos enteremos por el Grupo Municipal Socialista. Pero creo que la alcaldesa Quislant debería tomárselo muy en serio. Con esta iniciativa, tiene la posibilidad de pasar a la historia de Pozuelo y debería aprovecharla.
Al centro de Pozuelo hay que ir porque se necesite ir. Porque llame la atención. Y una vez allí comprar en sus tiendas. De lo contrario, todas las campañas de marketing que se hagan serán infructuosas. Es así y no tiene sentido de otra manera.
Pero, si a esta medida parche de ‘Conoce a tus comerciantes’, le unimos la injusticia que la propia iniciativa lleva consigo, mi rechazo es mayor. Ya han pasado los tiempos de las medidas colectivas en casos como éste. Y es que, señores, no a todo los comercios de las zonas señaladas les irá mal. A alguno le irá bien y, a ese, no tiene sentido ayudarle.
Pero no solo es injusta. Es discriminatoria. ¿Por qué se ayuda a los comerciantes del centro de Pozuelo o de la Estación y no a los de la Avenida de Europa?
Los de la Avenida de Europa también pagan sus impuestos. ¿Por qué a los comercios y no a los bares? ¿O a los restaurantes? ¿O a las empresas de jardinería?
A este paso, este Gobierno terminará haciendo de Pozuelo la ciudad del agravio comparativo.
Pero hay más. No es tiempo de paternalismos. En una sociedad de libre mercado no se entiende excesivamente estas ayudas. Si el negocio no funciona, y hay mil razones para ello, no se puede sostener artificialmente. Es un error. Se cierra y se abre otro. Es así de fácil o de difícil. Las ayudas no sirven nada más que para alargar sus agonías.
Yo, al menos, no entiendo que haya que mantener artificialmente un negocio por muy tradicional que sea. Es un romanticismo estúpido.
Ya sé que todos los progres de Pozuelo y, lógicamente, todos los comerciantes del centro de Pozuelo y de la Estación me criticarán. Están en su derecho. Pero se equivocarán. A mí me da igual.
No busco nada con esta crítica constructiva. Solo la adecuación de esta ciudad a los tiempos y eso parece que es casi tabú.
El Capitán Possuelo