Ignacio González sigue en precampaña: “Si los inmigrantes no quieren aceptar nuestros principios habrá que expulsarlos”
(19-01-15) El presidente de la Comunidad de Madrid Ignacio González ha apostado por aplicar una política de inmigración “rigurosa” que evite facilitar vías de entrada al terrorismo yihadista.
“La inmigración bien ordenada con principios claros es buena, si no se puede convertir en un elemento terriblemente peligroso para nuestras sociedades”, ha dicho González en un intervención en las jornadas sobre seguridad que ha celebrado el PP en Madrid.
El jefe del Ejecutivo madrileño ha recordado que la comunidad que preside es un territorio tradicionalmente de acogida y ha insistido en que la inmigración tiene efectos positivos, aunque si no es ordenada, ha advertido, los efectos se tornan negativos.
Así, ha apuntado que la política de inmigración debe ser “ordenada y legal”, porque en caso contrario “las organizaciones criminales pueden aprovechar el desbordamiento para su penetración con otro tipo de objetivos”.
El terrorismo yihadista, ha dicho González, está cada vez más presente y es “un peligro absolutamente real que desgraciadamente que tenemos encima”.
No obstante, ha señalado que no se puede atribuir sólo a la inmigración este tipo de terrorismo y no se debe utilizar este problema para aplicar políticas xenófobas.
Además ha recordado que los autores del atentado de hace diez días en París así como de los frustrados en Bélgica son nacionales franceses y belgas, que “desgraciadamente” no se habían integrado en estas sociedades.
La integración, ha añadido, “es fundamental para una adecuada política de inmigración, y si no se puede producir habrá que reaccionar y expulsar a quienes no quieren aceptar nuestro modelo de convivencia”, ha señalado.
“Hay una guerra y la podemos perder si nosotros dudamos y ellos no”, ha apuntado el presidente madrileño antes de insistir en que la inmigración es un instrumento “bueno” cuando se utiliza “adecuadamente” pero puede ser peligroso si no se ordena.
En cualquier caso, González ha destacado que Madrid es una comunidad de acogida que tiene un 14% de población inmigrante, donde residen 900.000 inmigrantes de más de 180 nacionalidades distintas, más otros 300.000 con doble nacionalidad.
Y ha asegurado que, según los estudios realizados, el 90 por ciento de los inmigrantes de la comunidad manifiestan haberse integrado plenamente y no se producen “especiales conflictos”. “Ojalá siga siendo así”, ha añadido.