Este año tampoco habrá Carnaval en Pozuelo: Quislant prefiere unas ‘Fiestas con olor a panceta’ a una serie de actos culturales que terminasen en un Gran Baile de Máscaras

Dentro de unos días, el sábado 18 de febrero comienza el Carnaval y termina el día 22, Miércoles de Ceniza. Pero en Pozuelo, a alguien se le ha debido olvidar porque no hay nada programado oficialmente. Y es una pena. Este año ni siquiera se ha organizado el simulacro de Carnaval en el Cubo Espacio Joven o en el Centro de Mayores de la Plaza del Padre Vallet, como ha ocurrido otros años.
La alcaldesa no está para nada. Y menos para farolillos.
Y eso que, según la propia web del Ayuntamiento, siempre hubo Carnaval en Pozuelo. Un carnaval que “con sus bailes de disfraces, organizados por diferentes asociaciones del municipio, llenan de color y alegría la semana previa al inicio de la Cuaresma”.
“Antiguamente, insiste el texto oficial, los Carnavales se celebraban en el Salón Recreativo de La Inseparable, en donde los pozueleros niños y mayores acudían disfrazados. También existió en Pozuelo la tradición de las Máscaras”.
Lo dice la wed del Ayuntamiento de Pozuelo. No me invento nada. Pero debe ser hace mucho. Del tiempo de Maricastaña.
Y es una pena. La alcaldesa Quislant se va a ir Pozuelo sin haber transformado nada. Ni siquiera una cosa tan sencilla pero tan importante como esta.
Desde El Correo de Pozuelo, sí hemos reivindicado varias veces las Fiestas de Carnaval en esta ciudad. Nos parece esenciales. Pero no las hemos reivindicado para que las asuma la concejalía de Fiestas sino la concejalía de Cultura. Porque de lo que se trata es de hacer una fiesta cultural que dure una semana con exposiciones, conciertos, teatro u ópera, conferencias…
Aparte, claro está, porque una fiesta de Carnaval importante sería un motivo fantástico para que los ‘Mil pozuelos’ que existen se fueran reduciendo. Como ocurría con la Cabalgata de Reyes. A la Cabalgata de Reyes Magos asistían vecinos de todos ‘los pozuelos’ que hay en la ciudad (ahora, eso también Quislant se lo ha cargado). Y estoy convencido de que a un Gran Baile de Carnaval, por ejemplo, asistirían también esos vecinos desperdigados en Urbanizaciones grandes y pequeñas…
Un Gran Baile donde se rivalizase en la belleza y originalidad de los disfraces, donde la elegancia primase sobre la horterada y donde la categoría estuviera por encima de lo cutre.
Un Gran Baile de Carnaval al que pudieran asistir vecinos de toda índole, clase y condición y que rayase a gran altura. Uno de los objetivos del carnaval fue, en sus orígenes, igualar clases y condiciones bajo el antifaz o la máscara.
Incluso, hay locales aparentes para celebrarlo.
Y es que Pozuelo necesita un Carnaval. Público. De categoría. De prestigio. Distinto. Para ser la envidia de los pueblos cercanos que, curiosamente, todos lo celebran.
Pero, sobre todo, insisto, para hacer política municipal transformadora. Para intentar acortar distancias entre urbanizaciones y los centros urbanos y hacer un gran Pozuelo. Sin ello es imposble hacer nada.
Y, además, porque Pozuelo no puede estar sin Carnaval cuando, en lo que queda de semana, las calles se llenarán de niños disfrazados (porque los carnavales los organizan los colegio) o de jóvenes dispuestos a reunirse en chalets o en peñas privadas.
¿Pero qué se le pude pedir a esta alcaldesa caduca si a ELLA lo que le gusta son las «Fiestas con olor a panceta»?
Incluso, las subvenciona.
Lastima de ocho años perdidos.
Juan Manuel Sánchez