Maxim Huerta confirma la vanidad enfermiza de Sánchez en El Hormiguero: «Me preguntó qué dirá de mí la Historia» cuando el exministro le anunció su intención de dejar el cargo

Maxim Huerta fue a El Hormiguero a hablar de su libro “Adiós, pequeño“ y de su librería en Buñol, pero salió el tema de su fugaz pasó por el Ministerio de Cultura en el primer Gobierno de Pedro Sánchez y ahí salió el escándalo.
Pablo Motos le preguntó al principio de la entrevista qué era más arriesgado, si abrir una librería o aceptar ser ministro: «Sin lugar a dudas, una librería, porque me ha costado mucho más».
Fue entonces cuando revelo cuánto tardó en contestar a la propuesta de Pedro Sánchez: «Es que ser ministro lo decidí en 30 segundos con Virginia, tomándome un cruasán y un café con leche. Me dijo aquel, Pedro, ‘¿quieres o no?’ Y son treinta segundos. En cambio, abrir una librería… Admiro a todos los empresarios que no lo son, que en el fondo es una carnicería, una droguería, una librería… Lo que cuesta en este país montar una simple librería de papeleos, de todo… Eso ha sido mucho más complicado, pero mucho más gratificante».
Ocupó el cargo durante una semana. La publicación de un fraude a Hacienda le obligó a dimitir. Motos se interesó por si le pagaron al menos el mes entero. «Lo correspondiente, 1.000 euros, me parece», contestó.
«Mucha gente cree que tienes un sueldo vitalicio… Yo incluso a lo que me tocaba renuncié. De hecho yo no quería nada. Ni siquiera cargos que me ofrecieron después para quedar bien. Quería hacer una digestión lenta, larga y dolorosa. No me quedé más que con el maletín, que está en casa», reveló.
Considera que pagó «tres veces» por aquel asunto fiscal: «Pagué lo que debía. La multa. Y con la dimisión».
Se sintió solo en el momento del adiós: «Me tiraron al precipicio. Si no te apoyan… A los demás les hicieron: ‘Eh, Pedro Duque, quédate, que no pasa nada’. ‘Eh, Nadia Calviño, quédate, que no pasa nada’. A mí, no. No hubo nadie. Esa tarde no llamó nadie. No llamó nadie. Yo pedí el coche y subí con el discurso ya escrito para dimitir».
La conversación con Sánchez
La última conversación de @maximohuerta con @sanchezcastejon #MáximoEH pic.twitter.com/zas529pWM4
— El Hormiguero (@El_Hormiguero) January 30, 2023
«Lo que resultó paradójico es que en lugar de… Ni un ‘confío’, ni un ‘pues ha sido…’. Empezó a hablar de él, de cómo se le vería en la Historia en el futuro. Empezó a hablar de que todos acaban mal en política, ‘mira cómo acabó Zapatero, mira como acabó Aznar, mira cómo acabó González’… ‘¿De mí, qué dirán?’».
Hace unos días recordó esa pregunta que se hizo el presidente voz en alta: «¿Qué dirá de mí la historia?».
Huerta se quedó asombrado: «Me entraban ganas de decir. Padre, que estoy hablando yo. Déjeme hablar».
Pedro Sánchez le pidió en aquella reunión algo muy concreto. «Me dijo que estuviera un mes callado. Estuve un mes callado no porque me lo pidiera él, sino porque no podía hablar».
Después, al mes, le ofreció otro cargo, no detalló cuál. Lo rechazó.