“Nos vendría muy bien”, la frase de la carta de don Jesús es demoledora: Lo bien que vendría esa parcela de Caná para que el Gobierno de Pozuelo hiciese viviendas para los necesitados

Vagamente sorprendido, aún, por la inacción y el abandono de la iglesia ante la exhumación de los restos del que los libró de las checas y con ellas del inmediato paso a la “otra vida “ y, a pesar de ello, ninguna apostasía entre los ayer mártires y hoy meapilas, aunque receptores de los terrenos de todos…
Vagamente sorprendido, digo, y regocijado ante las plegarias de los dizque hijos de Monserrat, en la procura de una sentencia benévola para los impulsores del “proceso”… Me desayuno con la carta que el futurible purpurado del Noroeste, nuestro guardián de las esencias cristianas y párroco de Caná…
Jesús, remite a nuestra excelsa alcaldesa una carta para que la misma tenga a bien en regalar al arzobispado madrileño, terreno y mantel para seguir haciendo el bien y tantas y tantas obras, casa sacerdotal incluida, que desde tiempo inmemorial en dicha parroquia se hacen.
Me satisface, sobremanera saber que la cultura también tendrá su espacio, sin duda nada nos hace más libres a las personas que el conocimiento, de hecho, la libertad no nos hace ni mejores ni peores; simplemente, nos hace personas (Azaña, dixit).
Pero, la libertad se agrieta, cuando penaliza en el espacio vecino y, claro, cuando lo de todos (parcela municipal aneja a Caná) se regala a petición de su párroco al arzobispado madrileño porque “nos vendría muy bien”…
Pero siempre nos quedará Unai solícito e inmediato, en defensa de lo de todos para que se expliquen y queden retratados: los de PP, VOX y C’S por consentir y los amigos de CumMoncloa, ergo PSOE, por girar la cabeza y dejarlo pasar; aunque eso si, al menos dijeron NO.
En una reciente encuesta el 31 % de los españoles no cree en Dios y apenas un 23% acude una vez al mes a misa. Sin duda, viendo lo que nos rodea y acontece, parece un verdadero milagro que Caná siga forjando hijos de la Iglesia y continuadores de la obra de Jesús.
Milagro que no creo ayude a crecer el “nos vendría bien… “ del párroco por Caná, cuando olvidando que la soberbia, cual dedo índice, cuando señala a alguien, otros tres se tornan hacia uno.
Ese mismo estudio estadístico nos recordaba que tres de cada cuatro ciudadanos de Expaña, exigen la separación de Estado-Iglesia, posiblemente la razón de que algún feligrés al estallido de sus palabras frente a los que no estamos de acuerdo con la cesión al arzobispo Ossoro de la parcela de todos los pozueleños, cogiera el andante y lo dejara con la palabra en la boca, en plena oratoria dominical. Y sin aplausos.
Sería curioso que la buena de Quislant, buscando el perdón… cristiano, se encontrara con el rechazo del votante que le había perdonado todo, incluso el no haber enseñado, aún, el billete de su viaje veraniego mientras los vecinos de la Calle Benigno Granizo, sobresaltados en la noche veraniega, quedaban sin casa y enseres, pero un viaje al Caribe y en buena compañía no lo puede destrozar una calle cutre, de un barrio, perdón, casco como La Estación.
A. Alejandre