Las zonas verdes en Pozuelo no pueden desaparecer: ¿Dónde está la sustituta a la de la calle Grecia? Su cesión a la Parroquia de Caná es un enjuague político-personal entre Susana Pérez Quislant y Jesús Higueras

El próximo Pleno del Ayuntamiento de Pozuelo aprobará un expediente para ceder GRATIS TOTAL una parcela valorada en más de 600.000€ a la Iglesia de Caná. Digan lo que digan esos escritos que presenta Don Jesús Higueras a favor de quien sea, todos sabemos en esta Casa que el regalo es para la Iglesia de Caná.
Si hay escándalos en este municipio que aún no han salido (muchos de ellos vinculados a Susana, no Quislant, si no otra, la García Cereceda y su “amistad” con nuestra alcaldesa y “vinculada” con Ciudadanos vía Albert Rivera), tendremos que empezar a taparnos la nariz en los pasillos municipales por todo lo que se rumorea y antes o después, como en otras recordadas ocasiones salpicará a todos estos.
La verdad es muy sencilla y todos los que van a votar a favor de este regalo lo saben. El párroco lleva años pidiendo esta parcela para fines sociales a todos los alcaldes que han pasado por aquí desde el año, creo recordar, 2005. Jesús Sepúlveda, Adrados y ahora Quislant. Todos sabemos cómo se ha ido negando esa posibilidad al todopoderoso párroco por una simple razón: Esa parcela era zona verde.
¿Qué ha pasado?
Y la pregunta hace que truenen los pasillos de La Casa.
Quislant necesitaba el apoyo de su “tocaya” frente a otros posibles candidatos a la alcaldía (seguro que algún día todo se sabrá), y del señor Don Jesús Higueras que, por cierto, al principio la ponía a caldo (y con razón) porque la señora alcaldesa miente más que ve.
Pero Don Jesús, erre que erre, seguía con su petición. Y un día, cuentan, ella decidió ayudarle porque así podría defender en el PP de Madrid que ella podría sacar mayoría absoluta. Si se ganaba a Caná y Don Jesús pronunciaba su nombre en misa, pensó, ella arrasaría.
Me juran y perjuran algunos cercanos a ella que fue su obsesión: cambiar la calificación de zona verde a dotacional. Lo que no sabían algunos funcionarios es la finalidad de esa modificación: Regalo a Caná.
¿Hubieran actuado igual si lo hubiesen sabido?
No lo sé pero, claro, no hay que ser muy listo para saber que las zonas verdes no pueden desaparecer, así que había que buscarle una ubicación en el Plan General.
¿Sabrán los concejales qué ubicación es, a cambio de qué, en qué forma?
Porque las zonas verdes de Pozuelo no se pueden perder… Por ahora, esa nueva parcela más de 1000 m2 por la que hay que cambiar los 1000 m2 que quieren regalar en agradecimiento por los “servicios prestados”anda escondida por alguna parte.
Un escándalo que sólo puede comprenderse si esas reuniones entre Quislant y Don Jesús, las peticiones de ella (todas espirituales, claro) y las exigencia del párroco ambiciosillo fueran explicadas a todos los vecinos de Pozuelo. Transparencia se llama.
Al final Quislant escuchó su nombre en Caná y su compromiso tiene que cumplirlo sí o sí porque las llamadas de Don Jesús son “inescrutables”. Incluso, que esas llamadas, dicen, puede llegar al marido de alguien muy relacionado con ella. Una mujer que es su “madrina política”.
Pero, curiosamente, ella no ha sacado la mayoría absoluta en Pozuelo. Depende de otros partidos que, engañados o no, han decidido pagar el precio de Quislant a la Alcaldía o, dicho de otra manera y como dicen algunos concejales del PP a sottovoce, “legalizar en Pleno lo indecente e inmoral de este regalo”.
Pues nada, sea. Luego no se quejen, ya se lo hemos advertido todos.
Y tengan mucho cuidado que Quislant no ha firmado nada. Ya se ha cuidado muy mucho de eso.
Cuánta pena me da este Ayuntamiento y Pozuelo. Y sobre todo el uso de nuestra parroquia en beneficio de alguien que nos utiliza de la misma manera que ha utilizado a todos y a nuestro propio municipio para su ambición politica.
Un funcionario ESPECTANTE