Susana Pérez Quislant nunca quiso ser alcaldesa de Pozuelo: Le tocó en una tómbola y ahora quiere volver a serlo para vengarse de Adrados, Taboada, Cifuentes, Garrido, Enrique y Yolanda
Estimado director de El Correo de Pozuelo: Te escribo unas líneas por si tienes a bien publicarlas…
Soy votante del PP y trabajo en el Ayuntamiento de Pozuelo. Tras leer los artículos que publicó ayer El Correo de Pozuelo sobre la fastuosa campaña de la candidata Susana Pérez Quislant y de sus disparates, quiero contarte algunas cosas.
Como no sé muy bien redactar, se lo contaré a mi manera:
Susana Pérez Quislant nunca quiso ser alcaldesa de Pozuelo. No vale para el puesto y ella lo sabe.
No tiene ni idea de gestionar y no le gusta trabajar. Tampoco tiene criterio político. Es mala profesional y pésima persona. Y lo sabe también.
Llora en las reuniones cuando algo no le gusta.
Nadie la respeta. Los trabajadores estamos hartos de sus cambios de criterio que nos obliga a rehacer constantemente expedientes.
Los eventuales viven como esclavos bajo presión de que les cese.
La oposición la considera una persona sin preparación que solo le gusta presidir los Plenos porque se siente con poder
¿Y sus concejales? Ahora ya no tienen ni miedo. Solo vergüenza ajena
¿Y por qué quiere volver a ser alcaldesa?
Por venganza. Esa es mi opinión. Para vengarse de Paloma Adrados, Taboada, Cifuentes, Garrido, Enrique y Yolanda que la consideran una “paleta”.
Ella vive para decir: Os he ganado.
Y ganará. En el Ayuntamiento hay quien dice que tiene una flor en el trasero…
Pero lo divertido será ver cómo pierde la mitad de los concejales y, si llega a ser alcaldesa tendrá que pactar, cosa que no se le da nada bien. Ella es la soberbia con carita de ángel.
Juan Pozuelo