Pozuelo Gigante: Gran éxito del II Encuentro de Gigantes y Cabezudos de la villa, poniendo de manifiesto, de nuevo, que hay espectáculos tradicionales capaces de unir a los mil pozuelos
Ayer domingo, Pozuelo de Alarcón se vistió de fiesta con motivo del II Encuentro de Gigantes y Cabezudos que organizó la comparsa pozuelera en colaboración (esta vez colaboración muy importante) con la concejalía de Participación Ciudadana y la ayuda de la Policía Municipal y Protección civil, que se lo curraron bien.
La celebración ha sido un éxito tan rotundo que, se supone, las autoridades estudiarán detenidamente para apoyar este importante evento en el futuro. Uno de esos eventos que pueden ayudar a unir a los mil pozuelos, que tanto echamos de menos en El Correo de Pozuelo.
Y es que la gran novedad de este año ha sido el recorrido del pasacalles, que empezó junto al Cerro de los Perdigones, en el tramo de la Avda. de Europa comprendido entre la Carretera de Húmera y la parroquia de Sta. María de Caná, y eso ayudó mucho a esa vertebración que necesita Pozuelo de Alarcón.
En el Encuentro han participado siete comparsas lo que ya ha favorecido enormemente el éxito del espectáculo.
Su recorrido, desde de la Avda. de Europa, pasando por la peatonal calle París resultó algo espectacular para cruzar la Avda. de Pablo VI y entrar en el pueblo por las calles Chinchón, Calvario y la Plaza del Rey.
Pero, si todo el recorrido fue fantástico porque el pasacalles fue sorprendiendo a los pozueleros, la llegada de la comitiva a la Plaza del Padre Vallet resultó apoteósica con el lugar a rebosar.
Y allí fueron entrando Torrejón de Ardoz que traía por primera vez a sus espectaculares gigantes carnavaleros, uno de ellos, recién estrenado.
Y Galapagar representado por Pedro y Lina, el picapedrero y su inseparable compañera.
Y Leganés con tres de sus gigantes. Y los zaragozanos de Borja y los madrileños de Colmenar de Oreja que debutaron en Pozuelo con sus respectivas parejas de gigantes.
Y la más joven de las comparsas, la de San José de Valderas, con sus dos gigantes, los Marqueses de Valderas, que fueron apadrinados por la Comparsa de Pozuelo de Alarcón en su presentación y que este año han traído a un nuevo cabezudo: Un original piloto con su pequeño avión de que ha sido “bautizado” en nuestra tradicional plaza.
Cerraron el encuentro los gigantes de Pozuelo. Las dos parejas formadas por los hidalgos Gabriel Ocaña y Mariana Garnica y los humildes Crispín y Julia, recordando, una vez más, la historia de Pozuelo.
Con este encuentro pozuelero se ha cerrado la temporada de gigantes de la Comunidad de Madrid.
Larga vida a estos eventos.