Aitana de OT: de una paga de «40 euros al mes» a ser la chica de oro del momento

A sus 19 años, la triunfita ha experimentado un cambio de vida radical en tan solo unos meses. De tener «40 euros de paga al mes», como confiesa en su última entrevista, a ser considerada la chica de oro del momento y cantar con Luis Fonsi o David Bisbal. Así es la carrera al éxito de Aitana Ocaña, para muchos la gran revelación de este 2018.
El triunfo de Aitana en el panorama músical, colocando sus dos canciones, Lo malo y Teléfono, en lo más alto de la lista de ventas en España y parte del extranjero, se ha trasladado a otros terrenos. Uno de ellos, como no, es el que atañe a la publicidad.
Las marcas, conscientes de su tirón mediático, han apostado por ella y han confiado en su imagen para promocionar sus productos. La primera compañía en fijarse en ella fue Inditex, que la convirtió en imagen de su campaña de primavera-verano para Stradivarius.
Pero no todo es música y publicidad. La joven tiene previsto sacar un libro el próximo otoño y ya es una de las influencer más destacadas de nuestro país. Con más de 1.200.000 seguidores en Instagram, Aitana es muy activa en la red social, donde muestra sus looks, momentos de su vida privada y enseña sus nuevos proyectos laborales.
Todo ello ha provocado que sus ingresos hayan aumentado hasta límites insospechados, con lo que eso conlleva: «Ahora estoy ahorrando para irme a vivir a Madrid. Y luego está lo de Hacienda, yo era una ignorante de la vida. Me vino mi padre y me dijo, ‘de lo que cobras, tal y tal va a Hacienda’. Y yo: ‘¡Pero qué ha pasado!’, ‘Hosti, yo no sabía esto’. Así que ahorro mucho, para mí y para Hacienda», confiesa a El País.
La gran fama adquirida ha supuesto que los medios la busquen y se haya convertido en objetivo de los paparazzi, más aún tras hacer público su romance con Luis Cepeda, su compañero de edición, también con gran tirón entre fans y medios. Ambos son ahora dos jóvenes que lidian con los problemas que suele conllevar la popularidad, tal y como reconoce Aitana: «He sacrificado privacidad, familia, no tener un hogar y vivir en hoteles, que todo lo que hagas o digas, aunque tengas 19 años, te lo echen en cara… A veces me da por pensar qué hubiera pasado si me hubiese presentado más tarde».
Para que la presión no la afecte, Aitana asegura que los suyos le aconsejan cómo manejar la situación: «Mis padres y mi prima Olga, siempre me acompaña, tiene 26 velan por mí. Me aconsejan que esté tranquila, que sea yo misma, que va a ser difícil. Yo quiero ir poco a poco».
Pese a todo, Aitana mantiene los pies en el suelo y no quiere ser considerada, por ahora, en la gran estrella del momento: «No sé hasta que punto eso es bueno, de hecho, es bastante malo… Mire, a mí me hace falta formarme más como persona. Ahora mismo no me atrevo a imponerme 100% porque no tengo mi criterio todavía. No me dejo influenciar a tope; tengo algo de criterio, pero no lo tengo entero. Cuando yo siga, entonces ahí sí diré pues esto ya lo he vivido y no quiero volver a repetirlo», dice con humildad.