Seguimos experimentando: Ahora, ante el fracaso de las medidas tomadas, el Ayuntamiento de Madrid prohibirá al 17% de los vehículos circular en episodios de contaminación
El Ayuntamiento de Madrid endurecerá en los próximos meses el protocolo anti contaminación con el que hacer frente a los episodios de alta concentración de dióxido de nitrógeno. El área de Medio Ambiente y Movilidad ya cuenta con un borrador que ahora debatirá con expertos, administraciones, grupos políticos, ecologistas y la FRAVM en la Comisión de Calidad del Aire y su ponencia técnica.
El Gobierno de Manuela Carmena (Ahora Madrid) incluirá dos modificaciones relevantes. La primera de ellas tiene que ver con el volumen de vehículos que podrán circular por la almendra central cuando se activen los escenarios 2 y 3 del protocolo. El Gobierno quiere que este nuevo protocolo esté activo tras el verano de este año.
Hasta ahora, el Escenario 2 contemplaba la prohibición de aparcar en las zonas SER a los no residentes y en el Escenario 3 se añadía la prohibición de circular en la almendra central –el perímetro interior de la M-30– a la mitad del parque móvil, en función de si el número de la matrícula es par o impar. A partir de ahora, en el Escenario 2 se incorpora la prohibición de circular a los vehículos sin etiqueta ambiental de la DGT en la almendra central.
Esto supone, según el consistorio, un 13,41% de los desplazamientos que se hacen en la almendra central y un 4,3% de las emisiones del tráfico de la ciudad. O lo que es lo mismo, podrán circular los vehículos que tengan algunas de las cuatro etiquetas ambientales: el distintivo 0 de los vehículos eléctricos; la etiqueta ambiental ECO; así como los distintivos C –vehículos de gasolina matriculadas desde 2006 y diésel desde 2014, además de aquellos que con tengan más de 8 plazas y pesados matriculados a partir de 2014– y B –los de gasolina matriculados después de 2000 y de diésel después de 2006, además de aquellos con más de 8 plazas y pesados matriculados después de 2005–.
Según el estudio sobre el parque móvil circulante realizado en 2017, el 17,7% de los vehículos que circulan por la ciudad no tiene distintivo ambiental de la DGT. Estos coches son los más contaminantes y, por tanto, los que se verán afectados por reformulación del protocolo.