La Navidad de Pozuelo de Alarcón es como un gran juego de la oca: Va de los churros del encendido de las luces al roscón de reyes y, lo demás, lo mira usted por la tele si le gustan estas fechas

Vale, aún no se sabe lo que va a hacer el Gobierno de Pozuelo en estas navidades. Hasta que no salga la revista ‘Vive Pozuelo’ de diciembre no se sabrá. Es el Cutre-BOE de la villa.
Vale, estoy suponiendo cosas. Es cierto. Pero conozco a Ulecia. Y a Oria. Y a Quislant. Y, por supuesto, a Calvo Sotelo. Y conozco su escasa capacidad para entender, imaginar y poner en pie algo en Navidad que vaya más allá de lo vulgar, lo antiguo y lo caduco. Y si no es así, me la envainaré. Pero me apuesto el bigote a que la Navidad de Pozuelo de Alarcón es como el juego de la oca: Va de los churros del encendido de las tradicionales luces al roscón de reyes y, lo demás, lo mira usted por la tele si le gustan estas fiestas. Ulecia, vete ya.
Y no exagero nada. A las pruebas de lo que se ha visto hasta ahora me remito. Mañana, por ejemplo, se va a celebrar uno de sus actos principales con ese “encendido de la Navidad” (esto es tan original que no se ha escrito menos de 10 millones de veces) en la Plaza Mayor de Pozuelo de Alarcón y, en este tradicional acto, se producirá la memorable actuación de los coros infantiles de dos colegios pozueleros cantando el “Fun, Fun, Fun” (baratita sale la producción), la novedad será el espectáculo “Homenaje a los Payasos de la Tele” que ofrecerá el conocido payaso Chifo (conocido en su casa a la hora de comer) y la degustación de un chocolate y churros que se repartirán en la céntrica plaza (con lo que uno se ahorra la merienda) como en los años 70 del siglo pasado. Ulecia, vete ya.
Si todo lo que va a venir después de este encendido hasta la noche de Reyes van a ser cosas como estas en la ciudad más rica de España, apaga y vayámonos directos a la cuesta de enero.
El Gobierno de Pozuelo, un año más, no se ha esforzado lo más mínimo en organizar unas Navidades por las que sentirse orgulloso. No. No se ha esforzado. Y un año más, cabrea. Su programación navideña es una programación sin imaginación. Hasta las luces que se van a encender mañana parecen sacadas de una película de navidad en blanco y negro. No tienen ninguna originalidad. Ulecia, vete ya.
Pozuelo, señores del Gobierno, necesita Prestigio y solo proponen cutrerío. Aún no se han dado cuenta de que Pozuelo de Alarcón es otra cosa y necesita otra cosa.
Tienen año tras año la oportunidad de hacer unas fiestas que unan a los mil pozuelos y año tras año la desperdician. Y a mí eso me da más pena que un villancico noruego.
Tienen a mano el ejemplo de lo que significa la Cabalgata de los Reyes Magos para esta villa, que cada año reúne a esos mil pozuelos, y no aprenden. Peor. Cada año es peor. Si el año pasado la gran novedad fue pastorear ocas, este año lo mismo pastorean conejos… Ulecia, vete ya.
La Navidad en Pozuelo clama por ser algo grande. Algo de lo que sentirnos orgullosos. Siento una gran envidia, por poner un ejemplo, de Torrejón de Ardoz. Allí la Navidad es grandiosa. Allí se vive. Aquí se sufre. Pasa de noche. No se entera nadie.
Y Pozuelo de Alarcón tiene todas las posibilidades y todo el dinero que se necesita para hacer unas fiestas prestigiosas. Pero si este Gobierno no sabe verlo, apaga y vámonos, de verdad. Ulecia, vete ya.
También es cierto que la mayoría de sus concejales no son de aquí y total para lo que les queda en el convento (y nunca mejor dicho), allá que zurzan a los pozueleros.
Vale, insisto, en que me estoy adelantando a los acontecimientos. Qué aún no se sabe que programación nos traeré el “Vive Pozuelo” y que voy de listo… Pero, vuelvo a decir, ojalá me la tenga que envainar…
En cualquier caso diré que, si este año he querido adelantar mi crítica, se debe al intento de conseguir que el Gobierno piense en algo que merezca la pena antes de que se haga pública la programación.
Pero me temo lo peor… Con Carlos Ulecia es imposible. Vete ya, hombre….
El Capitán Possuelo