El Pleno de hoy en el Ayuntamiento de Pozuelo ha sido interesantísimo pero no por las mociones que se presentaban que esas han cumplido en suertes, que se diría en términos taurinos.

Las mociones de la Oposición eran muy importantes de cara a la sostenibilidad medioambiental de la villa pero el Gobierno, jugando al pinto-pinto, ha decidido que unas se aprobasen y otras no se aprobasen. Así es el Gobierno de Pozuelo. Aunque daba igual que las aprobasen o no, ya que no van a hacer nada con ellas.  Las archivarán en la P de Papelera. Punto. Y las mociones del Gobierno no eran nada. Nada. Fuego fatuo de la alcaldesa.

Lo interesante del Pleno de hoy han sido otras cosas que han surgido sobre la marcha, especialmente, una. Un debate de última hora entre Pablo Pérez Perpinyà y Juana Beatriz Pérez Abraham, con toques personales, en el que la alcaldesa Quislant se quedó más perdida que el barco del arroz en Cádiz y que, como suele pasar en estos casos, trató de quitarse el muerto de encima. Porque la denuncia del portavoz de Somos Pozuelo tiene su perenguendengue. Puffff

Pero vayamos por partes que diría Jack el Destripador…

Para empezar la alcaldesa, en su habitual oscurantismo, se negó a dar una mini explicación sobre la dimisión de Félix Alba, cosa inaudita, toda vez que era el portavoz del Gobierno en el Pleno. Para esta señora, en Pozuelo no ha pasado nada. Y, si ha pasado, no ha sido culpa suya. Ni una palabra de agradecimiento  siquiera y mira que la ha sacado de charcos. Pero de eso ya hablaré mañana. Hoy no toca.

Después nos enteramos que van a ampliar el cementerio municipal. Un tema tan importante del que no sospechábamos porque se trataba “de la modificación puntual n.º 3 del Plan General de Ordenación Urbana”. Viva el oscurantismo pozuelero. Así da gusto.

De las mociones de la Oposición poco se puede decir. Salvo que demostraron que la alcaldesa no habla inglés. Todas eran iniciativas para convertir a Pozuelo en referencia de sostenibilidad medioambiental pero eso le da trabajo a un Gobierno al que ya han comunicado que no seguirá. Así que pasemos página. Se aprobó la moción del PSOE sobre el alquiler de bicicletas pero los socialistas deben apuntarse el éxito en el agua.

De las otras, cabe destacar el baño de Perpinyà a Eduardo Oria, que ya es el portavoz real. Ya lo era pero lo de hoy, le ratifica. En esa moción debutó Raúl Gónzález Andino como portavoz adjunto de Ciudadanos e hizo un discurso en el que no se sabía si estaba a favor o en contra. Nunca supe si iba o venía, como me pasa en las carreteras de Asturias. Lo volveré a ver en la grabación.

Después llegó el turno de las mociones del Gobierno. Extrañamente, la de la violencia en la mujer fue defendida por Isabel Pita y no por Beatriz Pérez Abraham, que es la concejala de Mujer. No hay quien entienda a este Gobierno.

Lógicamente, Pita salió del paso con profesionalidad. Pero solo eso. Dio la sensación que el discurso no era suyo.

Y en eso, llegó Carlos Ulecia. Viva España, viva el Rey, viva el Orden y la Ley… A Ulecia, desde el minuto uno de su intervención, se le vio con hambre de balón. A mí, alcaldesa, que los arrollo. Quiere ser el portavoz adjunto del Grupo. Se le notó. Incluso, se permitió el lujo de mandar callar a Helio Cobaleda. ¡Que te calles, coño! Lo de coño no lo dijo, eso está feo y se le está prohibido.

Nada. Dos mociones perdidas. Susana tiene aspiraciones y el Pleno tiene un uso excelente para ello.

Y llegamos a la pregunta oral del millón de euros. Perpinyà preguntaba sobre la gestión de Juana Beatriz Pérez Abraham al frente de la Concejalía de Familia, Asuntos Sociales y Mujer y se armó la tremolina.

Pablo, torero, dejó entrar a Beatriz y, cuando estaba entregada, le puso un tremendo rejón de castigo, usando conceptos de la tauromaquia. Y el rejón de castigo llevaba un nombre escrito: Francisco Javier Lozoya, el firmante del informe que se ha hecho sobre el funcionamiento de la Concejalía de Familia, Servicios Sociales y Mujer y en el que se denuncian muchas irregularidades en ella.

Pero, ay amigo, el tal Paco Javi es más cosas. Es teniente de alcalde del PP en Collado Mediano. ¿Collado Mediano? ¿No es ahí donde es también teniente de alcalde la mujer de Eduardo Oria? No. Ella es en Collado Villalba.

Es igual, el caso es que se formó la zaragata.

Quislant, como siempre, echándole la culpa a Diego de Aristegui y saliendo del tema a toda pastilla. Pobre Diego… Como si él hiciera algo que ella no supiese… En cualquier caso, sería bueno que lo aclarasen… Huele raro.

Y llegó el turno de la concejala que, por cierto, ocupaba lugar en el estrado toda ufana. Pero la denuncia la bajó de golpe y su tono de relajo ‘siestuno’ pasó a ser fuerte como un mal despertar y se enfadó tanto que dijo que Pablo Gómez Perpinyà tiene algo pendiente con la Justicia. ¿Cómorrr?

¿Es así, Pablo? ¿Cómo se resolvió, definitivamente, aquel tema de principios de la legislatura en el que estuviste implicado? Sería bueno también que lo aclarases.

Pero cuando todo parecía calmado con Almudena contestando a la pregunta onanista de Méndez Leite (triste labor), salió Bascuñana cabreado a más no poder y pidió a la alcaldesa directamente el cese de Juana Beatriz. Pufff. Y poniendo mil argumentos sobre la mesa.

Pero la alcaldesa no contestó. Ella no contesta nunca. Lo hizo Oria, su fiel escudero… Y a Oria le da lo mismo ocho que ochenta… El vive en Villalba y pasa de broncas. Y Oria dijo que todos estaban felices con la labor de Pérez Abraham…

Creo que esa defensa de Quislant vuelve a ser la del avestruz…

Y hasta aquí puedo escribir…

El Capitán Possuelo