La detención de Ángel María Villar abre una lucha de titanes, entre Javier Tebas y Florentino Pérez, para sustituirle al frente de la Real Federación Española de Fútbol

Unos dicen que no y otros que sí, como en La Parrala. Pero se veía venir. 28 años son muchos y Ángel María Villar ha acumulado muchos enemigos. Algunos de la talla de Javier Tebas, presidente de la Liga de Futbol Profesional, y Florentino Pérez, Presidente del Real Madrid.
Yo no digo que Ángel María Villar sea el dirigente del fútbol que merezca tanta reprobación. Eso lo dirán los jueces sobre la base de las pruebas que se reúnan y no por simples escuchas telefónicas. Pruebas que deben ser tan concluyentes como para declarar prisión incondicional sin fianza. Pero el juicio de las televisiones y de la prensa en general ya ha dictado sentencia de culpabilidad.
El proceso que ha acabado con Villar en la cárcel lo inició Miguel Cardenal, en su etapa de Secretario de Estado para el Deporte en su intento de democratizar el Reglamento electoral para la elección de Presidente de la Real Federación Española de Fútbol. Pero la elección de Villar fue incontestable con 112 votos a su favor de un total de 129 votos. Atrás quedaban los intentos de relevarle por parte de Florentino Pérez, Presidente del Real Madrid cuando apostó por la candidatura de Gerardo González a presidir la Federación Española de Fútbol, y la de Jorge Pérez, en las últimas elecciones, que fue avalado por Javier Tebas, Presidente de la Liga de Fútbol Profesional.
Tebas y Florentino, dos dirigentes futbolísticos que no congenian pero que tienen que soportarse.
Otro hecho que supuso parte del proceso que ha culminado en la detención de Villar es la denuncia por un presunto delito de malversación de fondos por importe de 1,2 millones de euros, un dinero público, destinado a proyectos en el extranjero, entre ellos una escuela de futbol en Haití que nunca se construyó. Pero otro más contundente es que le acusan de inflar en 50 millones de euros las cuentas de la Federación Española de Fútbol.
Ahora se inicia el procedimiento administrativo para inhabilitar a Villar para que el futbol español pueda fijar calendarios y demás objetivos para la próxima temporada. Lo normal.
Lo que no será normal es la lucha de titanes que llevarán a cabo Tebas y Florentino para hacerse con tan importante cargo.
Será épica.
José Antonio Rosa